martes, 6 de mayo de 2025

Entrevista: MARÍA LUISA REGALADO

 

Queridos amigos de La Orilla de las Letras,

no es la primera vez que lo decimos, pero creemos que no está mal recordar que en martes, ni te cases ni te embarques, pero nadie ha dicho nada de publicar una entrevista, así que aquí vamos con la que nos ha concedido la autora María Luisa Regalado:

¿Cuándo comenzaste a escribir?

Creo que la primera vez que escribí con conciencia de estar contando una historia fue cuando tenía ocho años. Entonces vivía en Chiclana de la Frontera. Allí oí hablar por primera vez de los fenicios, y despertaron tanto mi imaginación que escribí un cuento sobre un navegante tirio que viajaba acompañado de una paloma. No sé dónde terminó aquel cuento, pero aún lo recuerdo.

¿Y cuándo descubriste que la escritura era algo más que un pasatiempo?

Eso fue un poco más tarde, en mis primeros años de Universidad. Mi gran pasión siempre ha sido leer, pero de pronto descubrí que yo también tenía historias que contar, aunque fuera sólo a mí misma, y es lo que he hecho durante muchos años.

 
© María Luisa Regalado.

¿Qué lecturas crees que te han influenciado como escritora?

Sin ninguna duda, leer a Homero a una edad más bien temprana fue una experiencia que influyó en mí de forma decisiva. Quería recorrer el Mediterráneo en barco y vivir mil aventuras, como Ulises. Lo que jamás imaginé es que mi primera novela publicada trataría precisamente acerca de personajes del universo homérico, como es el caso de Clitemnestra.

También el Romancero español, con el Cantar de Mío Cid o las gestas de Bernardo del Carpio, los siete Infantes de Lara,… Son obras de una fuerza narrativa increíble. Por otro lado, me influyeron mucho las narraciones de Hans Christian Andersen, Rudyard Kipling o Jack London, entre otros grandes autores.

¿Qué estás leyendo ahora mismo? ¿Nos lo recomendarías?

Acabo de terminar la biografía de Alejandro Magno escrita por Robin Lane Fox. Os la recomendaría si os gusta la Historia Antigua, si tenéis curiosidad por los detalles y si sois apasionados del rigor histórico. Es una obra densa pero muy enriquecedora.

¿Cómo compaginas tu trabajo fuera del mundo de las letras con la escritura?

Aunque hoy en día resulta complicado compaginar nuestras obligaciones diarias con nuestras pasiones, creo que todos lo intentamos. Para mí la lectura y la escritura son esenciales; no podría renunciar a ellas, pero también he aprendido a ser flexible: cuando las circunstancias lo permiten, escribo. Si no, hay que tener paciencia y centrarse en lo que se está haciendo en ese momento.

De hecho, muchas veces una conversación casual o alguna actividad que no tiene en apariencia relación con mis historias me han ayudado a inspirarme o a encontrar un nuevo arco reflexivo, de modo que no lo considero tiempo perdido en absoluto.

Al fin y al cabo, se trata de disfrutar del camino y de poner el corazón en lo que hacemos sin autoimponernos presiones.

¿Cómo ves el panorama literario actual?

Veo un entorno muy vigoroso, muy dinámico. A veces nos quejamos de que la oferta de libros y novelas es excesiva, pero hasta hace pocas generaciones en España la mayor parte de la gente no tenía acceso a la educación; no sabían leer y por lo tanto no podían escribir. Que tantas personas se animen a contar sus historias me parece maravilloso.

Otra cosa ya es hablar de calidad literaria, pero ahí no me corresponde entrar, o de si resulta fácil orientarse entre tantas opciones. Quizá no lo sea, pero al final cada persona conecta con las historias que le hacen vibrar, que le transmiten algo, y en ese sentido, el panorama actual tiene mucho que ofrecer.

¿Escribirías una novela de moda a cambio de hacerte famosa?

No, si no creo en el proyecto y la motivación principal, o la única, es la fama. Comprendo que otras personas lo hagan y me parece muy respetable, pero no es mi opción.

Durante muchos años he escrito para ganarme la vida en el ámbito de la comunicación, pero eso es diferente. Aunque he aprendido muchas cosas en este tiempo, en esos trabajos no escojo los temas ni figura mi nombre como autora, y tampoco escribo ficción. Son actividades de carácter laboral en las que me implico plenamente, pero que en última instancia no me pertenecen. En cambio, tengo muy claro que lo que yo firmo es enteramente mío, y lo construyo con mi propio criterio y con mis valores personales. ¿Deseo que guste? Por supuesto, pero no a cambio de dejar de tener mi propia voz. De otro modo, creo que no podría desarrollarme plenamente como narradora ni conectar con autenticidad con las personas que leen mis obras.

¿Por qué escribir novela histórica?

Sencillamente, porque es el terreno en el que me muevo con mayor naturalidad: me siento en casa. La fase de documentación e investigación, que para otras personas puede resultar difícil o tediosa, a mí me encanta, como me entusiasma reconstruir el pasado a la luz de nuestras vivencias de hoy. Por ejemplo, recuerdo el momento en que crucé por primera vez la Puerta de los Leones de Micenas, mientras preparaba la novela: sobre aquellas mismas losas de piedra caminaron un día los grandes reyes del pasado, incluso la misma Clitemnestra. Para mí, sentir esa conexión es algo único.

Creo que tenemos mucho en común con las personas que nos precedieron, y si estudiamos sus historias con detenimiento encontramos momentos fascinantes, grandes gestas desconocidas, valores, tragedias y logros,… Me gusta revivir todo eso, aprender, reflexionar, entusiasmarme y compartirlo.

Tu primera novela publicada es Lechuza blanca sobre Argos. ¿Qué vamos a encontrar en este libro?

Lechuza blanca sobre Argos es la historia de una mujer atrapada en un mundo de héroes que un día decidió tomar las riendas y actuar según su propio criterio. La novela cuenta, en primera persona, la historia de la reina Clitemnestra, uno de los personajes más controvertidos y marginados de la mitología griega. Por una parte, se hace referencia a estos mitos, pero por otra también he querido recrear el entorno micénico de la época, con sus tensiones sociales, intrigas políticas y todo el drama humano de un mundo que está cambiando. Hay amor, traición, acción y mucha reflexión… Espero que, al adentraros en su historia, también os emocione a vosotros.

¿Qué tiene de ti Lechuza blanca sobre Argos?

Los personajes de Lechuza blanca sobre Argos, no solo Clitemnestra, se mueven en una dicotomía entre el destino que les ha sido asignado, y que parece inconmovible, y el que ellos desean conquistar, a pesar de que conlleve esfuerzos y sacrificios, y a pesar también de ser conscientes de que no basta con su simple voluntad para alcanzarlo. Esa dinámica es muy propia de las personas que se esfuerzan día a día por mejorar sus vidas y las de quienes aman, incluso en circunstancias que no siempre parecen las más favorables, y es algo que no ha perdido vigencia a lo largo de la historia de la Humanidad. Creo que todos podemos reconocernos un poco en eso. 

© María Luisa Regalado.

¿Qué esperas que los lectores aprendan de Lechuza blanca sobre Argos?

La primera vez que leí acerca de Clitemnestra me pareció una mujer terrible. Fue muchos años después, con un conocimiento más amplio de su historia, cuando me di cuenta de hasta qué punto las narraciones tradicionales sobre ella han influido no solo en nuestro pensamiento individual, sino en el ideario occidental, y esto no es ninguna exageración.

Clitemnestra es un símbolo muy poderoso, porque su figura recoge todo lo que una mujer de su época (y de épocas muy posteriores) no debía ser. Su asesinato, y el juicio a su asesino, marcaron la justificación de un trato duro e injusto hacia las mujeres, perpetuando posturas misóginas en la Antigua Grecia que después pasaron a Roma y al pensamiento europeo.

Con esta novela, además de dar rienda suelta a mi pasión de escribir, pretendo acercaros a la realidad de ese mundo remoto y casi olvidado en que se originó el mito, porque solo comprendiendo ese momento y ese lugar podremos dar un nuevo significado a la figura de Clitemnestra, y a la de otras mujeres y hombres que, como ella, simplemente no se ajustaron al molde que se les había impuesto.

Quiero, en definitiva, hacer un pequeño acto de justicia. Después de conocer a Clitemnestra, vosotros podréis juzgar si es o no acertado.

¿Qué nuevos proyectos literarios tienes en marcha?

Tengo entre manos un proyecto muy bonito y desafiante del que pronto espero poder contarte algo más. Sólo te diré que tiene también como marco el Mediterráneo, este mar que siempre me ha inspirado. Además, colaboro con iniciativas de divulgación en las que cuentan conmigo o bien me piden ayuda para aspectos diversos. Si queréis, podéis seguir mis andanzas en Instagram: @mediterraneoantiguo y en mi web: https://sites.google.com/view/mediterraneoantiguo

¿Te gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?

Quiero agradecerte la oportunidad de participar en este magnífico espacio, y la generosidad con la que abres tu hogar virtual. Lechuza blanca sobre Argos es un proyecto muy especial para mí, porque me ha permitido elevar una voz silenciada durante milenios, y compartirlo contigo y con tus lectores y lectoras es todo un regalo.

Muchas gracias, María Luisa, por tu tiempo, tus palabras y tus fotos personales. Te deseamos una carrera literaria larga y próspera.

Y a vosotros, amigos lectores, gracias por estar una vez más atentos a nuestras publicaciones. Ahora, ¡a leer!

Cristina Monteoliva