Título: La marca de la sangre
Autora: Patricia Cornwell
Traducción: Carlos Abreu
Publica: Ediciones B
Páginas: 432
Precio: 19,50 €
¿Te gustan las novelas policiacas en las
que las mujeres son las protagonistas? ¿Te interesan las historias en las que
no son precisamente los policías o los agentes del FBI los que resuelven los
crímenes? ¿Disfrutas, además, de las largas sagas en las que un mismo
protagonista resuelve un sinfín de crímenes? Entonces tal vez debas echarle un
vistazo a la saga de Patricia Cornwell en la que la forense Kay Scarpetta es la
protagonista. Yo he leído recientemente La
marca de la sangre, la vigesimosegunda novela de esta serie de novelas. ¿De
qué va esta nueva aventura de la doctora Scarpetta? A continuación os hablo de
ella, para que os hagáis una idea.
La doctora Kay
Scarpetta, jefa del Centro forense de Cambridge, en Estados Unidos, va a
tomarse por fin unos días de vacaciones con motivo de su cumpleaños. Su marido,
Benton, agente del FBI, ha alquilado un apartamento en Florida y ambos están a
punto de tomar un avión para disfrutar de la estancia allí. De pronto, la
mañana apacible en el jardín de su preciosa casa, con los planes para el viaje,
la deliciosa comida que prepara Kay y otros pequeños detalles, se torna gris. Y
es que Kay no solo ha encontrado sobre uno de los muros siete extrañas monedas
de cobre que le hacen pensar que alguien les vigila, sino que además Steve
Marino, el policía amigo de Scarpetta, no tarda en llamar para avisar de que
Jamal Narai, un profesor de música en un instituto, acaba de ser asesinado
delante de su casa, a pocos metros de la de Kay y Benton. Pronto Scarpetta y su
equipo descubren que el asesinato de Narai está conectado con otros cometidos
recientemente, y lo que es peor: que las pruebas apuntan hacia Lucy, la sobrina
de Kay. ¿Cómo acabará esta angustiosa aventura?
Kay Scarpetta, la
narradora y protagonista de esta historia, es una atractiva doctora forense
(según sus propias palabras) de mediana edad casada con un agente del FBI, Benton.
Su labor como jefa del Centro forense de Cambridge no se limita a realizar
autopsias de los cadáveres: Scarpetta es una excelente investigadora y sus
teorías ayudan a resolver truculentos crímenes, de manera que podríamos decir
que nuestra heroína trabaja como un agente de policía más, o una agente del
FBI.
Como narradora,
Scarpetta denota ser una persona extremadamente sensible (lo contrario de lo
que parece en su trabajo) que gusta de proporcionar minuciosos detalles al
lector sobre lo que le rodea, lo que hace, lo que piensa, etc. También gusta de
hablar del pasado y describir bien al resto de los personajes, lo que hace que
esta novela pueda leerse independientemente del resto de la saga.
Scarpetta está casada
con el eficiente agente del FBI Benton y es tía de Lucy, una joven con una
personalidad difícil pero con unas dotes extraordinarias para los asuntos
informáticos. La propia Scarpetta describe a su sobrina como una persona con
una personalidad un tanto psicopática, por lo que no es de extrañar que las pruebas
de los últimos asesinatos apunten hacia ella.
La
marca de la sangre, en definitiva, es una historia muy
cinematográfica con mucha acción en la que Kay Scarpetta, una mujer fuerte aunque
también muy sensible, ha de encontrar a contrarreloj al asesino que ha puesto a
su familia en el punto de mira. ¿Lo conseguirá? Si tienes curiosidad, ya sabes:
hazte con un ejemplar de este libro y resuelve este caso junto a Kay Scarpetta.
Cristina Monteoliva