Queridos
amigos de La
Orilla de las Letras,
hoy
entrevistamos a Francisco Javier
Martínez Villanueva, un autor que ha publicado con Létrame: Un pasado anónimo
y Crónicas tardías.
¿Qué
tendrá que contarnos sobre sus novelas y otros temas? Vamos a averiguarlo ahora
mismo:
¿Cuándo
comenzaste a escribir?
Tarde. Realmente fue a partir de
los 40 años cuando me animé a escribir. Quizá anteriormente algún relato corto
o algo muy pequeñito y poco significativo. Siempre digo que los que hemos sido
grandes lectores de jóvenes tenemos un escritor dentro, la cuestión es
atreverse a poner en papel todas esas historias que anidan en tu mente. A mi me
costó, pero estoy muy contento del resultado.
¿Y
cuándo descubriste que la escritura era algo más que un pasatiempo?
Cuando
te adentras en la fase de documentación, de diseño de la novela (aunque yo soy
bastante anárquico para esto), te das cuenta de la magnitud de la empresa que
vas a desarrollar. A mi me gusta diseñar las historias. Escribo intriga y
suspense, independientemente del género principal del relato, y eso, es
complejo y quita muchas horas de sueño intentando buscar giros, tramas y
subtramas. Si no estás totalmente decidido y con un proyecto claro, es normal
que mucha gente se eche para atrás. Si finalmente perseveras y consigues el
objetivo, la satisfacción de verlo acabado y a tu gusto es indescriptible.
© Francisco Javier Martínez Villanueva.
¿Qué
lecturas crees que te han influenciado como escritor?
De joven
me impacto Manuel Vázquez Montalbán, principalmente Los mares del sur, novela
que fue Premio Planeta a finales de los setenta, creo recordar. El mundo del
inspector Carvalho me sedujo y era como una droga seguirlo. Después he leído muchas
cosas diferentes, quizá Arturo Pérez Reverte ahora me llena más. En su momento
Eduardo Mendoza, también. Son etapas y fases. Actualmente leo poca novela
porque centro las lecturas en cosas que me documenten para el proyecto que
estoy siguiendo.
¿Qué
estás leyendo ahora mismo? ¿Nos lo recomendarías?
Me terminé hace poco El
problema final de Pérez Reverte. Me apetecía ver si había conseguido
plasmar la esencia de las novelas de habitación cerrada que tanto han gustado
en otros tiempos y que ahora casi no se escriben. Me gustó bastante. Hace poco
empecé La luna sobre Roma, de Emma Lira, es una escritora que me gusta
mucho cómo escribe y a ver con qué me sorprende.
¿Cómo
compaginas tu trabajo fuera de las letras con la escritura?
Bueno, supongo que con
perseverancia y cambiando horas de sueño por otras de imaginación y creación (a
veces frustración también). Es complicado porque, en mi caso, tengo varios
empleos y dispongo de poco tiempo, por lo que los procesos de escritura se
hacen largos. La ilusión de hacer lo que te gusta diría que es lo que te hace
obviar otros impedimentos.
¿Cómo
ves el panorama literario actual?
Pues lo veo muy complejo. Me
explico. El auge de la autoedición o coedición, como quieren camuflar algunas
editoriales el que el autor pague su libro, ha complicado en gran manera la
forma de entender y acceder a la publicación de un relato. Ahora todo el mundo
tiene la oportunidad de acceder a la publicación de sus escritos, esto para las
editoriales “clásicas” es un problema porque reciben ingentes cantidades de
manuscritos que, si antes ya no leían, ahora menos. De hecho, la mayoría sólo
aceptan ya manuscritos por invitación. Por otro lado, si quieres tener tu
espacio te ves obligado a autopublicarte y si suena la flauta y alguna
editorial te cree interesante, pues bienvenido sea. Saturación es la palabra
que creo que define mejor lo que opino del panorama actual. Incluso las
librerías están dejando de hacer muchas presentaciones porque no dan abasto con
las solicitudes que tienen y les ocupan muchos recursos para lo que luego
venden.
¿Escribirías
una novela de moda a cambio de hacerte famoso?
He escrito, escribo y escribiré
por el placer que me proporciona crear historias por mi mismo y desarrollarlas.
El factor fama, si algún día llega, genial, pero que sea como consecuencia. El
escribir con la premisa de una expectativa que no está en tus manos alcanzar es
algo que no contemplo, ni contemplaré.
¿Por
qué te has decantado por la autopublicación para dar a conocer tu obra?
Como he comentado en un apartado
anterior, dispongo de muy poco tiempo. El acto de estar buscando editoriales,
enviando manuscritos con plazos de respuesta (si la hay) muy largo, etc., no
puedo asumirlo. Prefiero este otro camino. Hago la edición que me gusta. Accedo
a un público cercano y que, poco a poco, intento ir expandiendo. Mi premisa
principal es hacer un trabajo de calidad y a partir de ahí hacerlo accesible a
los lectores que lo deseen. Llegar a una editorial, lo veo complejo a día de
hoy.
Háblanos
de tus novelas. ¿Qué vamos a encontrar en ellas?
Yo me defino como un escritor de
intriga y suspense. Mi primera novela Un pasado anónimo es un thriller
clásico. Trepidante, con un ritmo muy alto y que te mantiene continuamente en
vilo. La segunda Crónicas tardías está encuadrada dentro de una distopía
de ciencia ficción, aunque a mi me gusta decir que es una aventura de ciencia
ficción con intriga y suspense. Siempre suelo tocar algún tema polémico que me
ha suscitado dudas o que ha generado controversias en la población. El lector
encontrará relatos basados en hechos y documentaciones exhaustivas que podrán
comprobar o que podrán relacionar en muchos momentos con temas actuales o que
han vivido anteriormente. Siempre hay que tener en cuenta que es ficción y que
las tramas y las situaciones son inventadas en su totalidad.
¿Cuál
de tus obras te ha costado más escribir?
La primera con seguridad. El hecho
de ser el primer escrito en el que te involucras de esa manera. Las
inseguridades propias de no saber si lo que estás escribiendo será del agrado
de los demás y todas las demás dudas existenciales que se te vienen a la cabeza
en esos momentos, hacen que sea un trabajo más complicado. Después, con la
segunda, hay cosas que ya has superado y que sabes cómo contrarrestar
interiormente para que no afecten al proceso.
© Francisco Javier Martínez
Villanueva.
¿Qué
esperas que los lectores aprendan de tus novelas?
Sobre todo, a disfrutar. Escribo
historias de suspense e intriga precisamente por la parte de juego con el
lector que llevan implícitas. Ese juego de que te intenten adivinar la trama y
yo tenga que ir buscando las fórmulas para dar los giros y las subtramas es muy
satisfactorio. Aparte, siempre hay temas interesantes y, sobre todo, en Crónicas
tardías, se exploran con más profundidad la influencia de las decisiones
que tomamos a diario y las consecuencias que van teniendo en las personas y en
el entorno, como en las comunidades.
¿Qué
nuevos proyectos literarios tienes en marcha?
He empezado a documentarme para
una trilogía que tengo en mente y que une la Biblioteca de Alejandría con la
Iberia de la época y después en otras épocas con un enigma central. Está muy
verde todavía para saber si la idea prosperará o se quedará como una
posibilidad.
¿Te
gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?
Sólo agradecer a los lectores de
mis novelas por la buena acogida que han tenido. A los posibles futuros
lectores animarlos a que se lancen a leer a autores autopublicados que
necesitan más voz que los ya consagrados y que, en muchas ocasiones, tiene más
nivel que los otros. En particular agradecer especialmente la labor que hacéis
las personas como tú con estos blogs y reseñas que ayudan a dar algo de
publicidad y de acercan algo más nuestras novelas a nuevos lectores y otros
nichos. Y agradecerte a ti en particular esta oportunidad de expresarme en tu
blog. Muchas gracias.
Muchas
gracias, Francisco Javier, por tu
tiempo, tus palabras y tus fotos personales. Te deseamos una carrera literaria
larga y próspera.
Y
a vosotros, amigos lectores, gracias
por estar un día más atentos a nuestras publicaciones. Ahora, ¡a leer!
Cristina Monteoliva