Queridos
amigos de La
Orilla de las Letras,
volvemos
a la carga con las entrevistas, esta vez con la que tan amablemente nos ha
concedido Leticia Castro con motivo
de la publicación de su primera novela, Lamer
las heridas.
Leticia Castro nació en Buenos Aires en 1977. Estudió traducción literaria de la lengua inglesa en su ciudad natal y
actualmente vive en Madrid con sus perros
Tofi y Astor y sus gatos Matisse y Baloo. Ha resultado ganadora
o finalista en diversos concursos literarios de relatos, como el certamen de relatos cortos de la Fundación
Ateneo Cultural 1º de Mayo de Madrid, el certamen Pablo de Olavide, o el
certamen de narrativa corta “Carmen Martín Gaite”. También ha participado
en varias antologías de cuentos. Actualmente,
se dedica profesionalmente a la docencia
de inglés y participa en distintos talleres
literarios.
Dicho esto, os dejo con las
palabras de nuestra autora de hoy:
¿Cuándo
comenzaste a escribir? ¿Antes o después de entrar a formar parte de la Escuela
de Imaginadores?
Mis primeros relatos los
escribí a mis ocho años. Tuve una relación de amor odio con la escritura hasta
los treinta. A esa edad estuve un largo tiempo escribiendo una novela. Cuando
la terminé me di cuenta de que
necesitaba tomar clases de escritura si quería mejorar. Mi primer
profesor fue Juan Jacinto Muñoz Rengel, se cruzó en mi camino mucho antes de
que fuera el director de la Escuela de Imaginadores.
Por
cierto, ¿podrías hablarnos de lo que es la Escuela de Imaginadores? ¿Qué crees
que te ha aportado?
Es un espacio en el que te
juntás con otros escritores y cada uno lee trozos de la novela en la que esté
trabajando, o lee sus relatos. Juan Jacinto es quien nos guía, nos pone orden,
nos hace de psicólogo y de profesor.
La
escuela me ha aportado tanto que no sabría por dónde empezar. De mis compañeros
aprendo en cada clase al ver lo que escriben y al escuchar sus análisis y
opiniones. Somos todos muy diferentes en lo que escribimos y eso me encanta.
¿Qué
tiene que tener para ti un buen libro?
Tiene que tener un
lenguaje atractivo. Más que lo que me cuentan, me importa cómo me lo cuentan.
Además, tiene que tener personajes que me generen preguntas y que me hagan
pasar por diversas emociones.
©
Leticia Castro.
¿Qué
estás leyendo ahora? ¿Nos lo recomendarías?
Estoy leyendo varios al
mismo tiempo (siempre leo así), dependiendo mis ganas acudo a uno u otro. Estoy
leyendo How to write like Tolstoy, de Richard Cohen, Amantes y
enemigos, de Rosa Montero, El gato que amaba los libros, de Sosuke
Natsukawa y Plano Americano, de Leila Guerriero. El primero solo se lo
recomendaría a quien le guste escribir. El de Leila estoy por acabarlo (me
quedan cinco páginas) y lo recomiendo sin dudarlo, así como todo lo que leí de
ella, es magnífica. Los otros dos ahora mismo también los recomendaría (voy por
la mitad), pero tendría que terminarlos para estar segura.
Volviendo
a tu faceta de escritora, ¿dónde encuentras la inspiración?
Suelo encontrarla en mis
propias vivencias, en anécdotas que me cuenta la gente, en temas que me
interesan y en los libros que leo.
La
pandemia de covid ha cambiado los hábitos de muchos escritores, ¿ha sido tu
caso?
No, para nada.
© Leticia Castro.
¿Cómo
surgió la idea de escribir Lamer las
heridas?
Surgió al leer Tombuctú,
de Paul Auster. Ese libro me dio la idea de escribir sobre mi perro Tofi.
Camila apareció enseguida en mi mente, hacía tiempo que pensaba en escribir
sobre ella pero no sabía quién podía acompañarla.
¿Cuánto
tardaste en escribir esta historia?
Dos años y medio si
incluyo las muchas correcciones que continué haciendo una vez que di la novela
por acabada.
¿Por
qué decidiste ambientarla en La Alpujarra granadina?
Estuve unas navidades en
Atalbéitar, me alojé en la casa horno de pan que menciono en la novela. Tanto
el pueblo como la casa me parecieron el sitio que Camila elegiría para
refugiarse, por la tranquilidad, por no haber negocios, por las vistas desde el
sendero que sale de la casa. Además, suelo ambientar mis novelas y relatos en
sitios que conozco, me siento incómoda escribiendo sobre un lugar en el que no
estuve.
Es
fácil descubrir que Tofi, el perro protagonista de Lamer las heridas, se inspira en uno de tus perros. ¿Hasta qué
punto son iguales?
Son iguales en el carácter
y en el físico. Mi Tofi ha pasado (y sigue pasando) por ciertas adversidades
que comparte con el Tofi del libro. Al mío también lo encontré abandonado y,
como de su pasado no me ha querido contar nada, esa parte me la he tenido que
inventar por completo.
¿Y
Camila, la mujer que adopta a Tofi, se parece a ti?
Nos parecemos en que las
dos somos argentinas, tenemos más o menos la misma edad y las dos nos vinimos a
España, aunque mis motivos para abandonar Buenos Aires fueron muy diferentes a
los de Camila. También nos parecemos en que ambas le dimos un giro importante a
nuestras vidas.
©
Leticia Castro.
Lamer
las heridas es una novela muy actual que habla de
temas como el sentimiento de culpa, la depresión, la ansiedad, el trastorno
obsesivo compulsivo, las personas altamente sensibles, el bien que hace adoptar
a un perro (o un gato), etc. ¿No te da un poco de rabia que se la tache de
“historia en femenino”? ¿Cómo podríamos convencer a los lectores hombres para
que también se acerquen a este libro?
Yo no creo que sea una
historia solo para mujeres. De hecho, quienes más me animaron con esta novela
han sido mis amigos hombres, fueron ellos los primeros en decirme que les había
gustado. El sentimiento de culpa, la ansiedad, la depresión, o sea, todo lo que
le sucede a Camila le pasa tanto a hombres como a mujeres.
Yo
animaría a los hombres a leerla sin prejuicios porque la historia de una mujer
no tiene por qué ser una historia solo para mujeres.
¿Qué
esperas que encuentren los lectores en Lamer las heridas?
Espero que encuentren una
novela que les haga reflexionar sobre ciertas cosas que a mí me parecen
importantes, como el mirarse para dentro, ver por qué tomamos determinados
caminos, aprender a romper con las estructuras que nos han inculcado si no nos
hacen felices, y, sobre todo, replantearnos cuáles son las cosas que realmente
nos importan en la vida.
¿Qué
nuevos proyectos tienes en marcha? ¿Tal vez un segundo libro protagonizado por
Camila y Tofi?
Estoy escribiendo relatos.
Y también estoy trabajando de nuevo en la que es mi novela favorita de las que
escribí hasta ahora.
¿Te
gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?
Sí, me gustaría añadir que
Lamer las heridas es una historia más compleja de lo que se puede contar
en una sinopsis o en una entrevista sin hacer spoiler, sobre todo el personaje
de Camila.
Yo
diría que es incluso más compleja de lo que se puede contar en una reseña sin
hacer spoilers.
Muchas
gracias, Leticia, por tu tiempo, tus
respuestas y tus fotos personales. Esperamos que Camilia y Tofi lleguen pronto
a los hogares de muchos lectores, ¡y que Tofi no haga muchas travesuras allí!
Y
a vosotros, amigos lectores, muchas
gracias por estar una vez más al otro lado de la pantalla. Ahora, ¡a leer!