Tal vez seas muy joven
y no lo hayas oído nunca, pero los años 20 del siglo pasado fueron, para
muchos, toda una revolución para los sentidos. En aquellos años, bullía la
cultura, el arte y, por supuesto, la diversión, especialmente en ciudades como
Madrid. No cuesta imaginar que entre tanta luz también hubiera algo de
oscuridad: al fin y al cabo, los monstruos han acechado siempre. Monstruos como
el que acaba con las mujeres de La
fábrica de ángeles, la nueva novela de María Zaragoza de la que hablaremos
a continuación.
La
Sirenita de Ampurias no volverá a deleitar a los espectadores del teatro de las
Princesas con su canto. Por desgracia, ha aparecido brutalmente asesinada en el
escenario. La ha encontrado Pantaleona, el gerente del teatro, y de la
investigación se harán cargo el inspector Adolfo Kobler y el médico forense
Miralles. Y Adoración Venecia, por supuesto. No hay nada que se pueda escapar a
la bailarina exótica y propietaria del espectáculo en el que actuaba la
malograda Sirenita. La cuestión es: ¿lograrán entre todos capturar a tiempo al
asesino que quiere acabar con todas las mujeres relacionadas con Adoración?
¡Bienvenidos,
queridos lectores, al Madrid de los años 20! Un lugar en el que los
espectáculos son cada vez más atrevidos, la fiesta es continua y las mujeres
comienzan a liberarse de las cadenas del pasado. En este contexto tan alegre,
irrumpe de pronto un ser monstruoso que acaba con la vida de una de las más
queridas artistas, la Sirenita de Ampurias. El cadáver, previamente congelado, aparece
en el teatro de las Princesas, el mismo en el que cada noche tiene lugar la
variedad de espectáculos de la compañía de la exótica y enigmática Adoración
Venecia. Todo esto, y muchísimo más, nos lo va a contar Celestino Conde,
librero de segunda mano y coleccionismo y narrador con gracia y salero. Pero,
cuidado, que aunque Celestino lo sabe todo de buena tinta, a veces oculta
información. ¿Nos lo llegará a contar o se guardará algún dato hasta el final?
La fábrica de ángeles
es una novela coral, si bien en ella destacan Adoración Venecia, Dora, y el
inspector Adolfo Kobler.
Adoración
Venecia, Dora, es una mujer hecha a sí misma. Criada en Austria por una madre
soltera, piensa que su padre murió en la I Guerra Mundial. Cuál será su
sorpresa cuando alguien le haga llegar un libro maldito de su pertenencia. ¿Qué
esconde ese libro? ¿Y si su padre está vivo? No será lo único que tendrá que
averiguar: La Sirenita de Ampurias era una de sus chicas y Dora se empeñará en
encontrar no solo a su asesino, sino también al que acabe con la vida de
mujeres de su entorno.
Por
otra parte, el inspector Kobler es un hombre atormentado por algo que tuvo que
hacer en Marruecos durante la I Guerra Mundial, y otros hechos de su pasado
reciente. Aun así, su corazón roto acabará sucumbiendo a los encantos de Dora.
¿Podrán ser felices juntos?
Los
personajes secundarios son de lo más variopintos, y van desde respectados
forenses hasta videntes de pueblo, pasando por toda clase de artistas de
cabaré. Mis favoritos son: Lotte, la médico y mano derecha de Dora y la mujer
con la que mantiene una relación más allá de la amistad desde prácticamente la
infancia; Celestino Conde, nuestro díscolo narrador; Rodrigo Pantaleona, un
tipo de lo más peculiar que guarda muchas sorpresas; La flor de Filipinas, una
persona que hoy en día denominaríamos de género fluido, toda una artista sin
parangón; y todas las videntes, tan pintorestas y siniestras, que para mí es
difícil elegir con cuál quedarme.
La fábrica de ángeles
es en apariencia un thriller de época,
y ya sabemos que en este tipo de historias los asesinos suelen camuflarse entre
la multitud, a veces con disfraces. Pues bien, yo creo que en realidad esta
novela no es un thriller, sino que se
camufla de tal. O, en todo caso, es un thriller,
pero también una novela de corte fantástico con tintes marcadamente góticos,
una obra feminista, un alegato a favor de la diversidad de género y sexual y
una historia de entre guerras. Todo eso y mucho más que no os cuento, queridos
lectores. Es por eso que creo que es la mejor novela de María Zaragoza hasta la
fecha y no puedo más que esperar que la leáis con la avidez que yo lo he hecho.
Este
libro no es un monstruo, pero seguro que caeréis en sus garras.
Cristina Monteoliva