Estimados
amigos de La
Orilla de las Letras,
tras
un parón considerable, volvemos a la carga con la sección de entrevistas, en
esta ocasión, con la que nos ha concedido Juan
Antonio Malo Poyatos.
Juan Antonio
Malo Poyatos, granadino
de adopción, es ingeniero químico y
ejerce su carrera profesional en un centro de investigación aplicada. Apasionado
tanto de las ciencias como de las letras, ha cultivado de forma paralela un
profundo interés por la arqueología e
historia antiguas, en especial por los períodos prerromano y protohistórico. Como escritor, tiene varios ensayos en su haber, además de relatos de corte histórico que han
aparecido en diversas antologías. Con La
colonia tiria. Siervo de Sapas (Ediciones Algorfa, 2021) se inicia en el
terreno de la novela histórica.
Dicho
esto, ya estamos en disposición de empezar con la entrevista. ¡Allá vamos!
¿Cuándo comenzaste a interesarte por la historia y la arqueología?
En casa de mis padres había un gran salón
donde estaban las enciclopedias de muy diversos temas, desde pintura a
biología. Pero era la Historia lo que más me llamaba la atención desde que leí
una monográfica de la Segunda Guerra Mundial, en bachillerato. Y desde ahí, fui
atrás hacia la Prehistoria, el Neolítico y la Edad del Bronce. Me fascinaba
saber cómo surgieron las civilizaciones.
¿Y por la escritura? ¿Qué crees que te llevó a convertirte en escritor?
Desde pequeño he jugado a juegos de rol
junto a mi hermano Blas, y nos encantaba crear aventuras para jugar con los amigos.
Incluso hicimos pequeños libritos del género de escoger tu propia aventura.
Leíamos mucho, y eso nos despertó la necesidad de crear textos de forma activa.
¿Qué lecturas crees que te han influenciado como escritor?
Sin duda, Isaac Asimov, por sus relatos
llenos de lógica robótica y J.R.R.Tolkien, por sus textos llenos de naturaleza
y mitología. En ambos casos, muestran una cronología extensa que nos indica cómo
unos hechos que se creían inmutables e importantísimos en su momento, quedan
olvidados por generaciones posteriores, casi convertidos en leyendas. Muestran
lo perecedero que somos todos nosotros y las obras humanas.
©Juan Antonio Malo Poyatos.
¿Qué estás leyendo ahora mismo? ¿Nos lo recomendarías?
Estoy acabando "Historia fabulosa de
un viaje a Etiopía. La leyenda del Arca de la Alianza", de Titos Vivas. Es
como un ensayo disfrazado de diario de viaje en primera persona, de la expedición
de este moderno explorador. Recomendable sin duda para los interesados en la
arqueología bíblica.
¿Ha cambiado la pandemia de covid tus hábitos de escritor?
La pandemia me permitió dedicar más tiempo
a leer e investigar, debido a que la pasé con síntomas leves. En ese sentido,
no ha supuesto un parón en estas tareas. Al contrario, ya que servían como
válvula de escape.
Has escrito ensayo y relato. La
colonia tiria. Siervo de Sapas es tu primera novela. ¿Qué te ha motivado a
la hora de escribirla?
Hace unos años hice una visita al yacimiento
fenicio de Cabezo Pequeño del Estaño y allí en contacto con las piedras sentí la
necesidad de investigar y contar su historia. Me sorprendió ver lo desconocidos
que resultaban los fenicios pese a ser el sustrato de la cultura ibérica y quise
reivindicarles.
¿Por qué crees que hay tan pocas novelas históricas de periodos
prerromáticos?
Creo que en el difícil mercado actual de
los libros, los editores prefieren entregar al público los temas a los que
están acostumbrados, en vez de arriesgar por periodos poco conocidos.
Personalmente, no sabría decirte la razón, pero huyo de los temas clásicos y me
atraen esas eras oscuras.
¿Cuánto tiempo has estado documentándote antes de escribir esta novela?
El peligro de documentarse es que con cada
artículo se te abre un mundo de nuevas líneas de investigación, y hay que saber
parar para ponerse a escribir. En mi caso, de forma intermitente le he dedicado
en torno a cuatro años.
¿Qué tienen de especial los fenicios de La
colonia tiria. Siervo de Sapas?
Muestra la relación de los viajeros con los
autóctonos de la nueva costa donde arriban, y los conflictos que surgieron del
contacto entre ambos mundos. Asimismo, enseña el poder del conocimiento (por ejemplo,
el de la forja de metales) y cómo este acaba resultando más decisivo para la
vida de las personas que los bienes materiales en sí mismos.
©Juan Antonio Malo Poyatos.
¿Qué parte de esta novela te ha costado más escribir?
Tenía en mente el principio y final de la
novela. La parte intermedia me la han ido descubriendo los propios personajes
al ir interactuando, y en este sentido me ha resultado emocionante averiguarla
conforme escribía. Pero no estaba convencido de la estructura hasta que los tirios
me dieron la clave: intercalar pequeños momentos previos en la historia
principal, cada tríada de capítulos, al igual que los tirios usaban múltiplos de
tres codos fenicios en sus construcciones.
¿Qué esperas que los lectores encuentren en La colonia tiria. Siervo de Sapas?
Espero que les despierte la curiosidad por los
fenicios. En el sudeste español hay muchísimas poblaciones de origen tirio y
sidonio, más allá de Málaga, Cádiz, o Huelva. Además, les planteo una hipótesis
fundacional para el origen de una capital que no quiero mencionar al estar
desvelada en el libro, y de la que estoy convencido que tarde o temprano se
hallarán restos arqueológicos que la apoyen.
¿Qué nuevos proyectos literarios tienes en marcha?
Tengo varios frentes abiertos, incluida una
posible continuación de La Colonia Tiria. Un proyecto centrado en la Francia del
s. XVI es el más avanzado.
¿Te gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?
Quisiera darte las gracias por esta oportunidad
que me has dado para mostrar a los lectores el germen de mi novela, y animarles
a interesarse por la Historia Antigua más allá de griegos y romanos, y de
Europa. En Asia, África y Oceanía hay muchas culturas antiguas en espera de ser
difundidas al público en general.
Muchas
gracias a ti, Juan Antonio, por tu
tiempo, tus palabras y tus fotos personales. Desde el blog esperamos que los
tirios que llegaron a España sean pronto conocidos por un buen número de
lectores, y que todos tus proyectos lleguen, como ellos, a buen puerto.
Y
a vosotros, amigos lectores,
gracias, como siempre, por estar al otro lado de la pantalla. Ahora, ¡a leer!
Cristina Monteoliva