Estimados
amigos de La Orilla de las Letras,
¡Nuevo
día, nueva entrevista! En esta ocasión nuestra invitada es Teresa Domingo Catalá.
María Teresa Domingo Català
se licenció en Ciencias Políticas y en
Sociología por la UCM. Tiene en su haber varios premios literarios, entre
los que destacan el Premio Nacional de
Poesía José Zorrilla, (Valladolid, 2006), la Mención de la Editorial Hespérides, (La Plata, Argentina, 2006), la Selección en el I Concurso Internacional
de Poesía de Viña del Mar (Chile, mayo de 2007) y el 3r Premio de Cuento del Concurso Interdisciplinario de Arte de la
revista argentina El Rescoldo (Buenos Aires, diciembre de 2007). Finalista en el 7º Concurso de Poesía del
periódico español La Vanguardia (mayo de 2008). Quedó entre los 21 últimos
finalistas del Premio de Poesía Hermanos
Argensola (año 2008). Ha sido seleccionada para el II Día Internacional de la Poesía en Segovia (26 de marzo de 2011).
En diciembre de 2015 ganó el Primer
Premio de la editorial Letras Cascabeleras, que en abril de 2016 editará el
libro con el que ganó, titulado Las
flores. En febrero de 2022 ha quedado finalista en el concurso convocado
por la Fundación Juan Carlos Pérez Santamaría con su libro de cuentos Libro de las Filtraciones. Ha publicado
los libros de poesía: Iris de Sombras (Cuadernos
de la Perra Gorda, 2003), Loliloquios (Silva Editorial, 2004) La nieve, los ángeles (www.portaldepoesía.com, 2005), Un amor que palpita solitario
(Editorial Torremozas, 2006) Sonetilandia (Publicatuslibros.com), El Gravitar del Agua (Diedycul
Editorial, 2007), Compasión en el tiempo
de los locos (Editorial Omicron, 2007), Majar las Rosas (Editorial Omicrom, 2008), Luzbel de penumbra (El Gaviero, 2010). También ha participado en varios
libros colectivos de poesía. Ha publicado los libros de teatro: Las peculiares aventuras de Belinda
Miraflores y La revolución (Editorial Irreverentes, 2009) y Ciano solo (Silva Editorial, 2009). Sus
últimas publicaciones han sido: Luna Muerta
(Latin Heritage Foundation, 2014), Las piedras lunares (traducida al
náhuatl por el poeta Sixto Cabrera González y editada por Albert Lázaro Tinaut,
en el proyecto Carmina in mínima re, 2014), Destrucciones (Los papeles de Brighton, 2014), La Concejala de Igualdad (Editorial Potlacht, 2014), He hablado con la lluvia (Potlacht,
2021) y Las profanaciones del amor
(Letras Cascabeleras, 2022). Varias de sus obras, además, han dado lugar a
múltiples representaciones teatrales.
Dicho
esto, os dejo ya con las palabras de la autora:
¿Cuándo
comenzaste a escribir?
Siempre he escrito, ya de
niña gané algún concurso en el colegio. En la adolescencia también escribía
pero eran papeles destinados al cajón. No me pensaba a mí misma como escritora.
Cuando empecé a escribir “en serio” fue después de la muerte de mi madre. Ahí
volqué todo mi dolor en la escritura. Para mí la muerte de mi madre fue muy
traumática porque no nos llevábamos bien y antes de morir no se produjo ninguna
reconciliación. Ahí fue cuando empezaron mis problemas psicológicos.
Curiosamente, entonces escribía cuentos e intentaba alguna novela. También
escribía poemas, sonetos en particular. Escribía uno por día y eran infumables,
muy malos. Estuve unos cuatro años escribiendo sin cesar y sin pretender tener
calidad literaria. Hasta que llegó el año 1998 y me integré en una tertulia de
poesía donde aprendí la parte técnica de la escritura. Era la tertulia de
poesía Mediona 15.
¿Qué
lecturas crees que te han influenciado como escritora?
En poesía me ha influido el
poeta Juan Eduardo Cirlot. Más de uno de mis poemarios llevan el sello de su
influencia. No le puedo releer porque se me
“pega”. Es algo inconsciente. Escribo y ahí me deja su marca. En teatro
y prosa no reconozco influencias de nadie.
¿Qué
estás leyendo ahora mismo? ¿Nos lo recomendarías?
Estoy leyendo un libro en catalán. Llibre d’Amic e d’Amat, de Ramon Llull. Es de la época medieval y el libro que yo estoy leyendo tiene una versión moderna, actualizada, cosa que agradezco mucho, porque aunque puedes disfrutar del original si te pierdes tienes la versión actual. Existe en la editorial Pre- textos una edición del libro bilingüe español catalán, en una traducción realizada por el poeta Eduardo Moga. Por supuesto que lo recomiendo. Es una lectura lenta, paladeando la escritura, vas poco a poco y te vas llenando con las palabras de amor a lo invisible.
©Teresa
Domingo Catalá.
¿Ha
cambiado la pandemia de covid tus hábitos de escritora?
Soy pensionista, así que
la pandemia de covid no ha cambiado ninguno de mis hábitos. Sólo en los
primeros meses de confinamiento se vio alterada mi vida social. Pero mis
hábitos de escritura no se vieron afectados. Escribo poesía cada día. Ahora
hace muchos años que no escribo teatro. Ni prosa. Estoy volcada totalmente en
la poesía.
¿Dónde
encuentras la inspiración?
Para la poesía amorosa en
mi Amado, que es una fuente de inspiración continua. Para la poesía satírica me
inspiran las malas personas. El teatro viene en un clic, sucede algo en la vida
real que me inspira una obra teatral, larga o de microteatro. La prosa está
inspirada también en la realidad. Así podría afirmar que prosa y teatro se
inspiran en la realidad y la poesía en mis sentimientos, positivos y negativos.
Escribes
poesía, teatro y cuento, pero, ¿en qué terreno dirías que te encuentras más a
gusto?
También escribo novela. Me
siento a gusto en todos los géneros pero si tuviera que elegir uno sería la
poesía. La poesía llena mi vida. Con ella mi vida tiene sentido. Yo escribo
para la posteridad. Acepto la muerte pero no el olvido. Escribo para la gente
que aún no ha nacido. Para los contemporáneos también, evidentemente, pero
tengo más fe en un futuro que en el presente.
De
todos los premios literarios que has recibido a lo largo de tu carrera, ¿cuál
has recibido con mayor satisfacción y alegría?
El premio de poesía de l’Orgull Boig, recibido en Barcelona el año 2021. Traducido: Premio de poesía del Orgullo Loco. Es un premio que no da prestigio pero me hizo mucha ilusión ganarlo. Ya cuando vi las bases en el facebook me dije que quería participar en este concurso. Fui a recogerlo con una buena amiga. Se me rompió un zapato. Era domingo. Mi amiga ideó una manera de colocar el zapato y atarlo para que pudiera caminar con él. Yo vivo en Tarragona, fuimos hasta Barcelona para recoger el premio en una nave donde se ofrecía un espectáculo. Llegamos al fin. Recité los poemas ganadores y me dieron un cuadro muy bonito con una regadera adornada y muy bonita.
©Teresa
Domingo Catalá.
Define
tu poesía.
Mi poesía es
inclasificable. Busca el amor más místico, y también busca el amor más terreno
y material. Se embarca por cauces muy distintos unos de otros. Por una parte
está el misticismo, y por la otra está la sátira, la burla. Busco encontrarme y
definirme a mí misma cuando escribo poesía, desde todas las vertientes soy yo.
He escrito mucho sobre el amor y sigo escribiendo. He escrito también sobre la
identidad, sobre la relación con la madre, sobre la locura. Y también he
escrito poesía abstracta que espero publicar muy pronto y que como su nombre
indica es arte por el arte, sin significado, poesía por poesía, para verdaderos
amantes del género.
¿Qué
buscas transmitir cuando escribes teatro?
El teatro que escribo es
cómico en su mayor parte, aunque también he escrito teatro “serio”. Mi obra Ciano solo o En el diván se han publicado en libro, también en Internet, y ésta
última se ha representado en México. El resto de mis obras teatrales se
componen de comedias. Para mí el teatro es una relación de ida y vuelta con la
realidad. Se me enciende una lucecita, hay un tema que me fascina, que me toca
por dentro, y yo quiero hablar de ese tema y el lenguaje y escena elegidos son
dramáticos. Con La concejala de igualdad se
elaboró un cómic, un tebeo, y la obra quedó preciosa, con el dibujante Frigol
García, que es arquitecto.
Próximamente
vas a publicar un libro de cuentos. Háblanos de él.
Lamentablemente no lo voy a publicar. Seré muy sincera. Me entraron y me dijeron que había quedado finalista en un concurso. Y que me querían publicar el libro de cuentos, porque tenía la calidad literaria necesaria que pedían para su editorial. Yo me puse muy contenta, alegría que me duró el tiempo hasta que leí el contrato. Ellos iban a editar 1000 libros de los cuales yo debía comprar 100, a 16 o 17 euros. Por supuesto, me negué. Quiero denunciar públicamente a estas editoriales que juegan con la ilusión del escritor o de la escritora. Te lo pintan todo maravilloso hasta que lees que tienes que gastarte mil o mil quinientos euros o más, o encargarte de vender cien libros entre familia y amigos para poder publicar el libro. Decididamente, no voy a dar ningún nombre pero ya es puro cansancio, que no es la primera vez que me entran para proponerme una coedición después de participar en un concurso.
©Teresa
Domingo Catalá.
Por
cierto, ¿qué tiene que tener para ti un buen cuento?
Vida y enganche. El cuento
es un destello, y como tal debe brillar. Hay cuentos maravillosos escritos por
grandes autores, como los de Chejov, o los de Julio Cortázar y están vivos,
juegan con la imaginación del lector, le proponen rutas y caminos. Y no dejan
indiferente a nadie. Cada cuento es una nueva proposición. Y debe enganchar, el
lector viaja a través de las páginas y aunque es un viaje corto, debe quedar
maravillado entre las pocas estaciones por las que pasa.
¿Qué
nuevos proyectos literarios tienes en marcha?
He publicado muy
recientemente el libro Las profanaciones
del amor, en este mes de febrero de 2022, con la editorial de Cáceres
Letras Cascabeleras, un conjunto de poemas en prosa que hablan sobre el amor,
de carácter místico. Tengo previsto publicar La fosa de cobre en el curso
de este año, que es poesía abstracta.
Seguiré
presentándome a concursos, porque soy una escritora muy prolífica. Tengo escrita mucha obra entre poesía,
teatro, cuento y novela. Tengo los cajones llenos.
¿Te
gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?
Escribir en mí es una
vocación, una pasión, una forma de vida. No concibo mi vida sin la escritura.
Escribo para vivir, vivo para escribir. Sin los libros mi vida sería un erial,
un desierto, un absurdo. La literatura me lo ha dado todo y yo se lo doy todo a
ella. Le guardo mucha gratitud al daimon que es el que me da el arte, por todas
sus bendiciones.
Pues
muchas gracias, Teresa, por tu
tiempo, tus palabras y tus fotos personales. Mucha suerte con tu escritura.
Y
a vosotros, amigos lectores, muchas
gracias por estar de nuevo al otro lado de la pantalla.
Cristina Monteoliva