Últimamente vamos de
apocalipsis en apocalipsis. A todos ellos estamos sobreviviendo, pero, ¿y si
llegara el definitivo? Es decir, ¿y si ocurriera un cataclismo tal que la
perpetuación de la especie se viera comprometida? Seguro que algunos humanos
conseguirían salvarse y seguir adelante. ¿Tal vez en una suerte de búnker
gigante como el que nos propone Crónicas
tardías, de Fco. Javier Martínez Villanueva? ¿Y qué más pasaría con estos
supervivientes? Te daré algunas pistas en esta reseña.
El
Nido es un búnker complejo bajo tierra en el que viven los que supuestamente
son los últimos habitantes de la tierra. Ha pasado bastante tiempo desde que
tuviera lugar el acontecimiento que hizo inviable la vida en la superficie y se
hace necesario salir a explorar para comprobar si las condiciones ambientales
han variado. En caso afirmativo, se consideraría la posibilidad de volver a
vivir sobre el suelo. El encargado de tal misión no es otro que Elías, un
hombre entrenado desde hace años para ello. A pesar de los problemas que surgen
antes de la misión en el búnker, Elías consigue salir. ¿Qué encontrará allá
fuera? ¿Será algo tan peligroso como lo que encuentre al volver a su hogar?
Elías
es un hombre fuerte, valiente y decidido con una misión en la vida: salir fuera
del búnker en el que nació y explorar el exterior. El problema es que
últimamente están pasando muchas cosas en casa (muertes inexplicables,
conspiraciones, mujeres que se desviven por él, traiciones…). Cosas que puede
que pongan en peligro su misión.
La
vida en el búnker, como nos cuenta el narrador omnisciente (que no escatima en
detalles), está perfectamente organizada, si bien la mayoría de los habitantes
se dedican a la pura contemplación. El resto, se ocupa de las tareas
necesarias. Y de conspirar.
Los
personajes que giran alrededor de Elías son numerosos y variados. De entre
ellos, destacaremos a Alexander y Heidi Winkel, los hermanos fundadores;
Shaneka, la encargada de organizar el ocio; Anna, la jefa de seguridad y
entrenadora de Elías; Luther, el suicida; Arturo, el anciano mentor de Elías;
Frank, el mejor amigo de Elías y Alba, una robot humanoide que hará su
aparición a mitad de la historia.
Crónicas tardías,
en definitiva, es una novela de ciencia ficción, pero también un thriller que,
en multitud de ocasiones, juega al despiste. Como decía antes, el narrador no
escatima en detalles, de tal manera que el lector se hará una idea clara del
universo que el autor del libro ha imaginado. Solo queda que te decidas por su
lectura. ¿O acaso no quieres conocer los misterios a los que Elías se
enfrentará fuera y dentro del búnker?
Cristina Monteoliva