jueves, 11 de junio de 2020

Reseña: INSTRUCCIONES PARA UN FUNERAL, de David Means.


Título: Instrucciones para un funeral
Autor: David Means
Traducción: Francisco González López
Publica: Sexto Piso Editorial
Páginas: 192
Precio: 19,90 €

¿Te has parado alguna vez a pensar en cómo será tu funeral? ¿Te gustaría que tus familiares, amigos y compañeros te homenajearan de alguna manera en concreto mientras se despiden de ti? ¿Dejarías escritas las instrucciones para ello? ¿Que por qué te estoy haciendo estas preguntas? Pues precisamente porque el libro de relatos que comentaremos a continuación, escrito por David Means, se llama Instrucciones para un funeral. Si quieres saber qué contiene, tendrás que seguir leyendo este artículo.
Instrucciones para un funeral es original un volumen compuesto por un total de trece relatos precedidos por un prólogo escrito por su autor titulado Confesiones, un texto en el que nos habla de sus motivaciones como escritor y que estoy segura de que servirá de guía a todos los que deseen convertirse en unos expertos en la escritura de cuentos de corte contemporáneo. El título del libro lo recibe de uno de los textos, Instrucciones para un funeral, una historia donde su narrador no solo dice lo que quiere en su funeral, sino que también acaba hablando de las traiciones de sus antiguos amigos.
Instrucciones para un funeral es el relato que le da nombre al volumen, como decía antes, pero no el que da comienzo al libro. La historia con la que primero nos encontraremos es la que nos A puñetazo limpio, Sacramento, agosto de 1950, un relato donde seremos testigos de una pelea muy al estilo americano en un bar, que comienza cuando un personaje llama paleto a otro de otra localidad.  Otros relatos que dejarán al lector el genuino sabor americano son: El caudaloso Shannon, una historia donde su protagonista, un hombre en la consulta de un doctor a la espera de un diagnóstico, recuerda un romance extramatrimonial; El morro, un cuento de carretera en el que después de aguantar durante días a un tipo incapaz de callarse este deja a la chica por otra; El comité del hielo, un texto en el que conoceremos a dos pintorescos personajes obsesionados con la mala suerte; y La linde del bosque, Kansas, 1934, una historia policiaca en la que un agente de la ley ya jubilado recuerda cómo fueron los cinco días en el bosque a la espera de atrapar a unos malhechores.
La familia es también un tema recurrente en este volumen, fundamentalmente en dos vertientes. La primera de ellas sería la de la paternidad, reflejada en La silla, un relato en la que vemos cómo se las apaña un hombre que se ha quedado solo con su hijo pequeño; y Paternidad: 3, un relato que, a través de tres subhistorias analiza el asunto. La segunda de las vertientes sería la del protagonista que tiene un hermano vagabundo, enfermo o ambas cosas al mismo tiempo, como vemos en los relatos Adiós, hermano, una historia en la que el protagonista visita a su hermano en un piso que comparte junto a otros enfermos en vías de recuperación de sus adicciones; y Dos reflexiones sobre un hermano vagabundo, donde, a través de dos subrelatos, vemos, primero, a un vagabundo y, más tarde, al hermano enfermo.
La enfermedad, como ya habréis descubierto, es también un tema recurrente. Además de en relatos ya mencionados en los anteriores párrafos, podemos encontrarla en El artista terminal, una historia sobre un enfermo de cáncer que confiesa que cuando trabajaba en el hospital mató a un buen número de pacientes; y El lamento del mayordomo, un relato en el que un personaje que se cree mayordomo habla para quien en realidad no le escucha.
Como en Confesiones, el autor vuelve a tomar la batuta para explicar que Carver y Cobain son dos relatos inconclusos que vienen a homenajear al escritor y al músico de una forma muy particular. ¿Qué por qué el autor decide incluir dos piezas inacabadas en el libro? Ya lo he dicho antes: es el mismo Means el que lo explica.
Instrucciones para un funeral, en definitiva, es un libro de relatos extremadamente genuino, singular y único que, sin duda, hará las delicias de los amantes del buen cuento americano contemporáneo. Un volumen lleno de matices, de miradas, de luces pero, sobre todo, de sombras que acechan tanto a su autor como a los lectores tal vez para quedarse durante mucho tiempo tras la lectura. Dicho esto, ¿a qué esperas para adentrarte en sus páginas?
Cristina Monteoliva
© Cristina Monteoliva.