jueves, 7 de mayo de 2020

Reseña: TRISTEZA DE LOS CÍTRICOS, de Liliana Blum.


Título: Tristeza de los cítricos
Autora: Liliana Blum
Publica: Páginas de Espuma
Páginas: 160
Precio: 15 € / 5,99  (eBook)

La tristeza de los cítricos es una enfermedad producida por un virus, el Citrus tristeza virus, normalmente denominado por sus siglas, CTV, que ataca a naranjos, pomelos y mandarinos injertados en naranjos amargos. La enfermedad se manifiesta debilitando al árbol, haciendo que la producción de fruto disminuya, para, en poco tiempo, acabar matándolo. Si bien el virus no afecta a las personas, Liliana Blum ha decidido llamar muy acertadamente Tristeza de los cítricos a su último volumen de cuentos por el contenido del mismo. Un contenido del que os hablaremos en esta reseña.
Tristeza de los cítricos es un libro compuesto por un total de diez interesantes relatos cuyas tramas giran, casi siempre, desde un punto de vista femenino (la mujer es la protagonista o la víctima), en torno a las relaciones afectivas desequilibradas y enfermizas que, en ocasiones, desembocan en la desidia y la desesperanza, cuando no en algo peor.
El libro comienza con Conejillo de indias, una historia donde nos encontramos con un ama de casa que, tras serle su marido infiel, decide pagarle con la misma moneda sin saber que la nueva relación no acabará por satisfacerla. Este no es el único relato en el que nos encontramos con mujeres que buscan fuera de casa lo que no les ofrece su esposo o son la amante de un hombre casado. De hecho, es un tema recurrente en el libro que, con mayor o menor relevancia en la trama, encontraremos en los cuentos Cactus, una historia en la que su protagonista descubre lo poco idílico que es vivir con su novio, un hombre hasta entonces casado con otra; Picota, un relato en el que conoceremos la violenta muerte de una mujer que estaba con un hombre casado esperando sacar beneficio de la relación; Desnuda como sándwich de carne, una historia en la que una mujer sale una noche en busca de su amante sin saber que jamás volverá a casa y Agua en los pulmones, el relato de una mujer que, en un momento fundamental de su familia, rememora su historia de amor con su cuñado.
En el mundo hay muchos tipos de hombres que se aprovechan de las mujeres, como podemos ver en Luz de mi vida, fuego de mis entrañas, historia que nos habla del anhelo de una hija por recuperar a un padre hasta entonces en la cárcel y lo que este le hace el día que por fin se reencuentran; Una novia para Kafka, un relato sobre un hombre que se obsesiona con Kafka y su escarabajo, hasta el punto de llegar a secuestrar a una mujer con un oscuro objetivo en mente; Madriguera, un cuento en el que conoceremos a un vividor que conquista mujeres para tener un sitio que habitar; y El diablillo en la balsa, un cuento en el que una mujer se enamora de un balsero cubano sin saber que este acabará dejándola plantada justo cuando ella creía que le sacaría de la cárcel.
Pero, ¿acaso no hay también mujeres que se aprovechan de los hombres? Sí, claro. Algunas las conoceremos en los ya mencionados relatos Picota y Agua en los pulmones.
Aunque muchos de nuestros personaje se dejan llevar por sus deseos, sus pasiones, podemos decir que algunos de ellos están claramente trastornados, como el protagonista del ya mencionado cuento Una novia para Kafka o la narradora protagonista de Palabras bajo tierra, una mujer que le tiene unos celos enfermizos a la escritora que acude con frecuencia a la cafetería donde ella trabaja.
Algunos de estos relatos tienen un trasfondo de violencia (en ocasiones, los verdaderos protagonistas de sus correspondientes historias) que nos habla de la preocupante situación que se vive en México actualmente, especialmente para las mujeres. Estos serían Luz de mi vida, fuego de mis entrañas, Picota o Desnuda como un sándwich de carne.
Y así es como llegamos al final de este artículo, siempre sin dejar de señalar que Tristeza de los cítricos es un volumen compuesto por diez singunals cuentos en los que nos encontramos cómo la euforia de sus personajes, sus esperanzas por el amor, se pueden ir apagando desembocando en finales sin duda agridulces que darán mucho que pensar a los lectores. Un libro rico en matices, en tramas y actores que despertará en vosotros una gran variedad de sentimientos, desde la ternura y la empatía, al miedo o el más puro desasosiego. Dicho esto, ¿a qué esperáis para conocer esta original obra?
Cristina Monteoliva


© Cristina Monteoliva.