Título: Las altas montañas de Portugal
Autor: Yann Martel
Traducción: Julia Osuna Aguilar
Publica: Malpaso
Páginas: 310
Precio: 22 € / 7,99 €
(ebook)
¿Cómo
afrontamos el sentimiento de pérdida? Y cuando hablo de pérdida, me estoy
refiriendo a perder lo que te hace entender tu vida, lo que le da sentido, aquello
alrededor de lo cual se articula el resto de lo que te sucede y que solo
entendemos en su relación con esa base fundamental. Ese momento de pérdida y de sinsentido es
el fundamento del pensamiento religioso (que no de la religión). Podemos buscar
transcendencia o intranscendencia, pero buscamos ese sentido más allá de seguir
con los quehaceres de la vida como si no hubiera ocurrido nada. Porque esa nada
es la que nos aterroriza.
Desde
mi punto de vista, este es el tema principal de Las altas montañas de Portugal, de Yann Martel, un libro en el que
su autor nos cuenta tres historias en tiempos distintos y que, en realidad, son
una sola. Porque el sinsentido y el sentido que buscamos tras él nos hace
descubrir las misteriosas relaciones entre personas, eventos y sentimientos
que, en apariencia, nada tienen que ver.
Tomás
perdió a su mujer, a su hijo y, poco después, a su padre. Desde entonces anda
hacia atrás para no afrontar un mundo que no entiende. Trabaja en un museo en el que un día encontró
el diario del padre Ulisses, misionero portugués que habla de un crucifijo
extraño y que, según Tomás, puede cambiar la visión que tenemos de la religión
y de la historia. Con el coche que le ha dejado su tío, el primer coche que
vieron él y todos los habitantes de los pueblos que visita, se lanza a la
búsqueda del tesoro del que habla el padre Ulisses en los pequeños pueblos de las
altas montañas de Portugal.
Eusebio
es un forense muy interesado tanto por
la religión y los evangelios como por Agatha Christie. Un buen día, una señora
se presenta intentando entender la muerte de su marido o, mejor dicho, su vida.
Su marido perdió a su hijo cuando era muy pequeño. Ahora la mujer tiene la
pérdida de su hijo, además de la de su marido. Eso es, justamente, lo que quiere
que el forense le explique.
Peter
es un senador Canadiense, hijo de portugueses que vivían en un pueblo perdido
en las altas montañas de Portugal. Desde que murió su mujer se siente perdido
en su trabajo. Un buen día, de visita en Oklahoma, se ve fascinado contemplando
un centro donde estudian a los simios. Motivado por un extraño impulso que ni
él mismo sabe explicar, adquiere un chimpancé, Odo, que a partir de entonces
será su amigo inseparable, y decide irse con él a vivir al pueblo de sus
padres.
Yann
Martel es muy conocido por su novela La
vida de Pi, que además fue llevada al cine en una exitosa película. En Las altas Montañas de Portugal mantiene
su particular estilo, contándonos pequeñas historias que tienen las dosis
justas de mágica y épica, pero que en realidad son historias de personas
normales enfrentándose a sentimientos y circunstancias que son tan prodigiosos
como la vida misma.
Sergio M. Planas