lunes, 13 de agosto de 2018

Reseña: LOS INSIGNES, de David Pérez Vega.


Título: Los insignes
Autor: David Pérez Vega
Publica: Editorial Sloper
Páginas: 197
Precio: 15 €

No sé a vosotros, pero a mí ms suele resultar bastante curiosa la idea que tienen de los escritores las personas que no están metidas en alguno de los submundos de la esfera literaria. Idea que tiene más que ver, normalmente, con lo divino que con lo humano, cuando los escritores, desengañémonos todos de una vez por todas, tenemos más de lo segundo que de lo primero. Si queréis saber hasta qué punto, no tenéis más que preguntar. O leer un buen libro sobre el tema. Uno como Los insignes, la magnífica novela en clave de humor de David Pérez Vega de la que hoy os vengo a hablar.
Ernesto Sánchez es un inspector de Hacienda de treinta y seis años de Móstoles que, cuando no trabaja como funcionario público, lee y escribe poesía. O, más bien, cuando no está leyendo y escribiendo poesía, está trabajando como funcionario. Y es que el gran sueño de este hombre bajito y miope es convertirse en un poeta de éxito, aunque, por más que lo intente, no logre conseguirlo. Un buen día, Kim Yong-un, el líder Norcoreano, se pone en contacto con él en calidad de seguidor de su blog de reseñas literarias de libros de poesía, Poesía sin distopía. Kim Yong-un, además de lector, es también poeta y está preparando un libro que su tutor de español, un escritor mexicano, le está traduciendo a nuestra lengua. Mientras llega el día en el que por fin Ernesto Sánchez pueda leer el manuscrito de su nuevo amigo, el primero le contará al segundo, tarde tras tarde, no solo cómo han sido sus pasos en el mundo de la poesía española hasta el momento, sino también los entresijos de este sector.
La gente fuera de los círculos literarios suele pensar que los escritores son seres glamurosos que siempre están en fiestas y viviendo la gran vida gracias a lo que ganan vendiendo sus libros en librerías y grandes almacenes. Puede que en el caso de algunos escritores esto sea así, pero lo cierto es que para el resto las cosas no suelen ser tan maravillosas. Así, la mayoría de los escritores ni nadan en la abundancia gracias a lo mucho que venden ni tienen tantos lectores y admiradores. Habréis escuchado alguna vez, además, aquello de que en España hay más escritores que lectores. Una máxima que se hace tristemente cada vez más cierta, especialmente en el más que difícil sector de la poesía, lugar en el que se mueve, bastante torpemente, nuestro protagonista, Ernesto Sánchez.
Ernesto Sánchez es un hombre que, a sus treinta y seis años, ve como no solo la juventud se le escapa, sino también su oportunidad de convertirse en un poeta célebre. Desde que empezara a moverse por el mundillo literario, le cuenta a su nuevo amigo tarde tras tarde desde su pantalla de ordenador, se ha topado con personajes variopintos que ha ido encajado en distintas tribus de escritores (los poeta-macho, las poetas-hembra, los poeta-burgueses, etc), editores que tienen poca consideración hacia los libros y los autores que publican y concursos literarios donde no todo parece justo. El mundo de la poesía no es, al final, como este poeta con una escrita obra tan extensa como el tamaño de su maltrecho ego, lo imaginaba cuando comenzara a moverse en él. Pero no desespera. Y tampoco Kim Yong-un debería hacerlo pues, al final, para todos hay un hueco (sobre todo cuando eres el líder supremo de un país asiático).
Los insignes es una novela valiente, sin duda, la mires por donde la mires. En primer lugar, por la forma en la que David Pérez Vega ha decidido contarnos la historia, presentándonos a su protagonista como único y rencoroso narrador que dialoga día tras día con Kim Yong-un a través de la pantalla de su ordenador, personaje este segundo que nunca contesta pero que sabemos que está al otro lado, y no en la imaginación de nuestro poeta, por los datos que aporta el propio Ernesto. En segundo lugar, por meter a un personaje tan comprometido como Kim Yong-un en un berenjenal de este tipo. Y en tercero, y más significativo para mí tanto como lectora como escritora, por hablar de cómo es la vida de los escritores que nunca llegan a triunfar y de los entresijos del mundillo literario poético. Un submundo dentro de la esfera literaria que tiene sus propias peculiaridades, pero también comparte otras muchas con los submundos del relato o la novela. Y en clave de humor, para más inri, ¡no podía ser de otra manera! Porque si estas cosas los escritores no nos las tomamos a risa, ¿cómo nos las vamos a tomar?
¡Ah!, si yo os contara… Pero no, no voy a contaros nada más. Si queréis saber cómo funcionan tanto el mundo literario español como los poetas patrios, las frustraciones a las que debe enfrentarse un joven poeta que no encaja en el mundillo de la poesía y hasta dónde puede llegar el ego de todo escritor novel (o no tanto), no dejéis de haceros con un ejemplar de Los insignes, una genial novela, tan delirante y divertida como llena de momentos interesantes, tal vez ficticios, tal vez reales, pero que, sobre todo, darán mucho que pensar. ¿A qué estás esperando para hacerte con tu ejemplar?
Cristina Monteoliva


© Cristina Monteoliva.