martes, 4 de enero de 2022

Reseña: DENTRO, de Isabel Ruiz Ruiz.


Conocí la obra de Isabel Ruiz Ruiz allá por el año 2016, cuando vio la luz su libro Mujeres, el primero de una serie de seis a la que pondría colofón Mujeres españolas. Esta colección está compuesta por seis libros dedicados en exclusiva a las féminas que, de una u otra manera, tienen méritos más que suficientes para formar parte de la historia que se cuenta en los libros pero que, por el hecho de ser mujeres, han sido invisibilizadas o no lo suficientemente puestas en valor. La estructura de estos libros consiste en dieciocho biografías de mujeres artistas, científicas, políticas… acompañadas de una ilustración a modo de retrato de cada una de ellas y una frase relevante pronunciada por la mujer en cuestión. El ejercicio de reivindicación y memoria, de visibilización, resulta más que necesario y las ilustraciones son una verdadera maravilla. Sus mujeres de ojos grandes y mirada nostálgica no pueden ser más bonitas y evocadoras.

         Una vez finalizada la serie, Isabel Ruiz se metió de lleno en un proyecto mucho más ambicioso para alumbrar el libro que nos ocupa. Dentro es una novela gráfica sobre la vida de las presas políticas en las cárceles franquistas. La historia oficial de ese oscuro periodo de nuestra historia la escribieron los vencedores y se encargaron de ocultar sus episodios más siniestros. Eso sin contar que las mujeres en ese tiempo no formaban parte de la historia oficial. A la muerte del dictador en 1975, los partidos políticos españoles tomaron la decisión de establecer un Pacto del Olvido para evitar tener que lidiar con el legado de la dictadura y propiciar la transición. Dicho pacto se vio reforzado por la Ley de Amnistía de 1977 que aseguraba que no habría enjuiciamiento para los crímenes cometidos durante la dictadura. Una de las consecuencias de estas decisiones fue que la verdad de lo ocurrido fue silenciada, sin contar con que no hubo castigo para los culpables ni reparación para las víctimas.

         La autora, como tantísimas personas de varias generaciones entre las que me incluyo, creció ignorante de lo que había ocurrido durante la dictadura franquista. Ni en el colegio ni, muchas veces, en la propia familia por miedo, se hablaba de esa época. Somos muchos los que nos enfrentamos a ese largo silencio y, ya de adultos, intentamos llenar los vacíos documentándonos e investigando por nuestra cuenta. De esa investigación posterior llevada a cabo por Isabel Ruiz Ruiz nace este libro. También, una vez más, de su objetivo de visibilizar a las mujeres que sufrieron la represión. Ellas fueron perseguidas por sus ideas, pero también por ser de familias fieles a la República. Muchas veces, al no poder apresar a sus familiares masculinos, el odio de los vencedores se volcó sobre ellas.

         En esta ocasión la autora ha dejado de lado el color para crear las ilustraciones en blanco y negro, mucho más sobrias y con el punto de dramatismo necesario para afrontar la historia que nos relata. Cada capítulo se compone de un texto breve que narra los hechos y que son una síntesis, principalmente, de los escritos y declaraciones que dejaron las presas así como de los estudios de reconocidos historiadores. El texto, apenas unas pinceladas, nos pone en situación para entender en toda su dureza las ilustraciones a las que acompaña. También aparecen frases textuales de las protagonistas de este duro relato. El hilo conductor nos lleva desde el instante en el que las represaliadas entraban en prisión hasta que salían mucho tiempo después para comprobar que la vida había seguido afuera sin ellas, que el tiempo solo se había detenido en el interior. Interrogatorios con torturas, condiciones de vida infrahumanas, enfermedades y miseria, niños robados… Mucha injusticia y mucho dolor hay en estas páginas, pero también un retrato de la solidaridad, la dignidad y la esperanza de todas esas mujeres de las que la historia convencional pocas veces se acuerda.

         Isabel Ruiz Ruiz publica su obra a través del sistema de micromecenazgo en la plataforma Verkami. En todos estos años, desde aquella primera entrega de Mujeres, cada vez que ha lanzado uno de sus proyectos, no he podido dejar de maravillarme por la velocidad en la que cumple sus objetivos y supera con creces el importe mínimo para poder llevarlos a cabo. Y no es para menos: sus obras lo merecen y tiene un público fiel que espera ansioso sus novedades. Una vez más, la escritora e ilustradora no decepciona, y su obra está a la altura del interés que genera y del apoyo que recibe de sus seguidores. Un libro duro pero muy necesario.

María Dolores García Pastor