Título: Solo las bestias
Autor: Colin Neil
Traducción: Isabel Fuentes García
Publica: Principal de los
Libros
Páginas: 256
Precio: 17 €
Muchos son los que hablan maravillas de
la vida del campo, con su aire puro, su contacto directo con la naturaleza y
demás. No piensan estos individuos que lo que para ellos puede resultar el
paraíso es el infierno para otros. Personas que, por un motivo u otro, se ven
obligadas a continuar las tradiciones del mundo rural mientras anhelan una vida
distinta. Como muchos de los personajes que conoceréis en Solo las bestias, la exitosa novela de Colin Niel de la que os
hablaré en este artículo.
Évelyne Ducat, la mujer
del hombre más rico del Causse, ha desaparecido. Su coche se encuentra aparcado
a las afueras de la ciudad, sin ninguna pista del paradero de su dueña. Es 19
de enero y la nieve lo cubre todo. Dicen los lugareños que tal vez la distinguida
dama ha sido víctima de la tormenta, una suerte de temible viento local que,
cada cierto tiempo, mata a alguien. Pero no, no ha podido ser el viento. Hay
algo más detrás de esta desaparición. Algo que sabremos tras los relatos de los
ganaderos Michel y Joseph, la asistenta social Alice, la diseñadora Maribé y el
estafador Armand.
Todo comienza un frío
día de mediados de enero en una región ganadera de Francia en la que el trabajo
es duro y la soledad, una constante en la vida de muchos de sus habitantes. Es tan
preocupante la depresión que muchos de los ganaderos sufren a causa de esta
soledad, de hecho, que cuatro trabajadores sociales han de vigilarlos
continuamente. Uno de ellos es Alice. Alice está casada con Michel, también
ganadero local. Ninguno de los dos son felices juntos. La rutina hace tiempo
que acabó con su relación y Alice decide, pensando que Michel jamás se
enterará, entablar una relación amorosa con Joseph, el más triste de todos los
criadores de ovejas de la zona. Lo que descubre de su amante, una vez que este
decide acabar con la relación, la dejará helada. Pero, ¿tendrá de verdad algo
que ver con la desaparición de Évelyn?
Al mismo tiempo,
llegará a la ciudad otra de nuestras narradoras: Maribé. Maribé es una
diseñadora joven con poca suerte en el amor. Una nueva ilusión la llevará a
mudarse al medio rural. Una vez allí, sin embargo, descubrirá que nada era como
ella querría que fuera.
Aunque todos los
narradores, y a la vez protagonistas, de esta novela de final insospechado me parecen
interesantes, mi favorito es, sin duda, Armand, un joven procedente de un país
africano en el que muchos chicos se dedican a las estafas por internet a través
de correos electrónicos que prometen fortuna y amor, y donde muchos creen en la
brujería, hasta el punto de hacer todo lo que les diga un brujo por conseguir
sus fines. Su testimonio nos hará conocer una realidad de la que poco sabemos,
algo tan relevante como escalofriante.
Solo
las bestias ha recibido el Premio Polar del Quais
du Polar 2017, el Premio Polar Landerneau 2017, el Premio Cabri d´Or 2017 y el
Premio Goutte de Sang d´Encre 2017. Sin duda, los jurados de estos certámenes
habrán sabido valorar la originalidad de su historia y de su narración. Tampoco
creo que hayan pasado desapercibidos para ellos los retratos que el autor hace
tanto del duro mundo rural francés como del olvidado (por el mundo occidental)
país africano en el que vive Armand. Y de la soledad y el anhelo de amor de sus
personajes, por supuesto: el verdadero motor de esta historia.
Solo
las bestias, en definitiva, es una novela negra muy
original que descubre al lector mundos y personajes ricos en matices. Una
historia tremendamente actual en el que todos los personajes son importantes,
sus motivaciones y sus sentimientos. Un libro en el que nada es lo que parece y
la verdad sobre la muerte de la rica Évelyn está escondida delante de las
narices del lector. ¿Te atreves a comprobarlo?
Cristina Monteoliva