Queridos
amigos de La
Orilla de las Letras,
como
veis, ni nos vamos de vacaciones ni descansamos el fin de semana. Por lo tanto,
aquí tenéis la entrevista que nos ha concedido David Sanz:
¿Cuándo
descubriste que la escritura era algo más que un pasatiempo?
Creo que todos los que devoramos historias
somos conscientes de las emociones que nos puede provocar un libro. Tanto
positivas como negativas. Ese poder, bien manejado… es devastador.
¿Qué
lecturas crees que te han influenciado como escritor?
Hay de todo y creo que por eso mi
obra es tan ecléctica. Desde Stephen King a Houllebecq, pasando por García
Márquez, Margaret Weis, Taylor Jenkins Reid, Tolkien, Becky Chambers, Asimov, Robin
Hobb o Stefan Zweig. Y nacionales como Santiago Lorenzo y muchos de los
ganadores del premio Minotauro. No le encuentro lógica a la lista. Me encanta.
¿Qué
estás leyendo ahora mismo? ¿Nos lo recomendarías?
Estoy con varios a la vez, el clásico
caso de «un libro para cada lugar». En el transporte público estoy leyendo Carl
el mazmorrero. En casa justo he acabado El foso de los olvidados y
he empezado Salitre y cenizas. Y también me gusta leer ensayos de forma
intermitente, como es el caso con The Singularity Is Nearer. Los
recomendaría todos.
¿Cómo
compaginas el trabajo fuera del mundo literario con la escritura?
Bueno, en realidad mi trabajo se
desarrolla dentro del mundo literario, así que estoy todo el día
empapado en el tema. Llevo desde 2010 trabajando en una editorial estupenda.
Pero suelo dedicarme a la escritura todos los días por la noche (después de ver
una serie) y los fines de semana. Es un hábito.
¿Cómo
ves el panorama literario actual?
Complicado. Hay demasiadas
novedades que el mercado no puede absorber y los lectores no pueden leer.
Además, competimos por captar la atención no solo contra otros libros, sino
también contra múltiples opciones de ocio que cada vez son más accesibles. Por
si fuera poco, el peligro de la IA. El mundo está cambiando a un ritmo veloz y
no somos conscientes. Pero todavía hay esperanza: que los lectores apoyen lo
que realmente les gusta y no se dejen llevar por modas. Que exploren y salgan
de su zona de confort.
¿Qué
tiene en común tu escritura con el mundo de los videojuegos?
Diría que el ritmo, la
construcción de mundos, la sorpresa constante. El último juego que más ha
impactado en mi escritura ha sido Outer Worlds. Me pilló a mitad del
libro y me sorprendió por las similitudes. No es que piense en mi escritura como
en videojuego, pero mi estilo capitular puede recordar a escenas o misiones.
¿Escribirías
una novela de moda para hacerte famoso?
Mi intención
no es hacerme famoso, sino que me lea mucha gente y lograr emocionar. Dudo que
alcance la fama a estas alturas de la vida, pero no me importaría conectar con
más público si no tuviera que renunciar a mi estilo.
¿Qué
destacarías de las obras que has publicado?
Sus giros sorprendentes, los
personajes y la facilidad de lectura. Creo que he encontrado un buen equilibrio
y son obras aptas para todos los públicos, con dosis de frikismo y mucha
crítica social. Y lo bueno es que cada lector puede quedarse con lo que más le
gusta de cada una.
Han
robado el infinito es tu última novela publicada. ¿Qué nos puedes contar de
ella?
Lo malo de crear una obra con
tantos giros argumentales es que cualquier palabra mal contada puede ser un spoiler
(y los detesto). Así que me limitaré a decir que he sido fiel a mi estilo: va a
sorprender, quizá logre emocionar y dejará un buen sabor de boca. Es la novela de
ciencia ficción que a mí me hubiera gustado leer. Humanista, con los personajes
en el centro.
¿Por
qué te has decantado por la autopublicación?
Esta pregunta es compleja. En primer
lugar, para aprender y poder explicar a los autores que conozco por qué la otra
alternativa es mejor. Pero también porque el proceso editorial suele ser lento
y muy subjetivo. Si lo hubiera iniciado con una editorial tradicional, no
tendría tres obras disponibles ni serían así, porque habrían intervenido muchas
más personas.
©
David Sanz.
¿Qué
esperas que los lectores aprendan de tus escritos?
Nada en absoluto, porque no escribo
para aleccionar. Solo quiero que los lectores pasen un buen rato, sonrían mucho
y de vez en cuando se queden pensando.
¿Qué
nuevos proyectos literarios tienes en marcha?
Estoy en esa deliciosa fase en la
que no tengo prisa por empezar y dejo que las ideas reboten en mi cabeza. Ni siquiera
las apunto. Las que sobreviven durante más días son las que merecen ser
contadas. O quizá no y sea un método nefasto. Da igual, nadie se va a enterar.
Es un caos que siempre acaba en fertilidad.
¿Te
gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?
Solamente agradecer la oportunidad
a un autopublicado. Quizá esta entrevista la lean cuatro gatos, pero ya son
cuatro más de lo que podría conseguir yo solo. Así que gracias y felicidades
por tu labor.
Muchas
gracias, David, por tu tiempo, tus
respuestas y tus fotos personales. Te deseamos mucha suerte en tu carrera
literaria.
Y
a vosotros, amigos lectores, gracias
por estar un día más pendiente de nuestras publicaciones. Ahora, ¡a leer!
Cristina Monteoliva