Título: Diario de un vampiro
adolescente
Autor: Tim Collins
Ilustraciones: Andrew Pinder
Traducción: Mado Martínez
Edita: Editorial Bóveda
Páginas: 224
Precio: 13 € / 4,99 € (epub)
Si la adolescencia es una época difícil,
imagina cómo tiene que ser para esos chicos que no se parecen en nada a los compañeros
que tú y que yo tuvimos en el instituto. Seres con poderes mágicos y vidas
eternas. Como los vampiros, por ejemplo. ¿O es que no crees que sería horrible
quedarte estancado en la etapa más desconcertante de la vida por toda la
eternidad? Tanto como si tu respuesta es afirmativa o negativa, creo que la
verdad la encontrarás en Diario de un
vampiro adolescente, la novela de Tim Collins de la que hoy os hablaré.
Nigel Mullet es un
vampiro con la eterna y complicada edad de quince años, lo que no le supone un
gran problema hasta el año en el que irrumpe en su vida un nuevo compañero de
clase, el desconcertante Jason, y Chloe, su novia, decide cortar su relación
con él. Pronto Nigel deja de ser uno de los alumnos más populares para
convertirse en el más triste y solitario de los estudiantes. ¿Quién iba a
decirle a este joven vampiro que el desamor y la envidia hacia un misterioso
recién llegado le iban a producir tantos quebraderos de cabeza? ¿Conseguirá
Nigel superar este bache?
Nigel, el protagonista
y narrador de esta historia, es un vampiro adolescente muy bien integrado en la
sociedad, gracias a que puede deambular de día por la ciudad y a que casi nadie
conoce su auténtica condición de bebedor de sangre. Como lleva años y años
repitiendo cursos en el instituto (lo que para la mayoría de nosotros sería una
auténtica pesadilla), sus notas son excelentes. Su belleza vampírica, además,
hace que sea muy popular entre las chicas. Aunque a Nigel solo le interesa una:
Chloe. La cuestión es: ¿estará Chloe preparada para salir con un vampiro siendo
ella una humana?
Nigel, además de sacar
buenas notas, también es bueno en el deporte. El mejor de todos. Hasta que
llega Jason a su clase, un chico con pinta de troglodita y muy malas pulgas. La
rivalidad entre ambos se hará patente desde el primer momento. ¿Conseguirá
Nigel superar a Jason en las pruebas deportivas y en todo lo demás?
Diario
de un vampiro adolescente, como bien indica el título, es
una novela escrita a manera de diario por Nigel, el chico vampiro. La narración
comienza un 31 de agosto de un año sin determinar y acaba el 4 de enero del
siguiente año. Hemos de pensar que estos años pertenecen a la década de 2010,
al menos, puesto que Nigel hace mención a muchos de los elementos culturales y
tecnológicos que han aparecido recientemente y que forman parte de la vida de
los jóvenes actuales.
El estilo del Nigel
narrador es ameno, cercano y divertido, sin caer en el simplismo. Bastante
sentimental, en algunos momentos. Entrañable y simpático, desde luego, lo que
hace que enseguida el lector conecte con el personaje.
A pesar de la trama
principal, he de decir que no todo es instituto, chicas y compañeros que caen
mal en esta novela. El Nigel protagonista vive con sus padres, una hermana y un
señor mayor al que le obligan llamar abuelo. La convivencia en la casa familiar
es un quebradero de cabeza para el muchacho; una verdadera delicia para el
lector. Sobre todo por esos desencuentros que Nigel tiene con el abuelo y lo
desquiciante que puede resultar para él su hermana, tan estancada en los diez
años de edad.
El texto viene
acompañado por un buen número de ilustraciones de Andrew Pinder, a tinta negra,
que nos dan cuenta de los momentos más divertidos, dramáticos y patéticos en la
vida del joven Nigel. Imposible imaginarse el libro sin ellas.
Diario
de un vampiro adolescente, en definitiva, es un libro que
nos hace ver que si los vampiros adolescentes existieran, tendrían más que ver
con los adolescentes humanos que con los estereotipos que han creado algunas
sagas de éxito. Una obra brillante que gustará tanto a los más jóvenes como a
todos aquellos que lo pasamos bien con historias sobre institutos, noviazgos
fallidos y seres de otro mundo que a veces no dan tanto miedo. Una lectura
maravillosa para iluminar días oscuros. ¿Te animas a comprobarlo por ti mismo?
Cristina Monteoliva