Título: Atardecer
en París
Autor: Nicolás
Barreau
Traducción: Carmen Bas
Álvarez
Editorial: Espasa
Págs: 301
Precio: 19,90 € / 9,99 € (epub)
¿Os acordáis de esos tiempos en los que
la piratería no hacía todavía estragos y para ver una película de estreno
acudíamos a las salas de cines casi religiosamente los domingos? ¿No echáis de
menos los cines dentro de la ciudad, esas salas antiguas, con historia,
ciertamente con encanto? Yo sí, y mucho. Por eso la lectura de “Atardecer en
París”, la novela de Nicolas Barreau me ha traído tantos y nostálgicos
recuerdos. Pero dejad que os cuente un poco más sobre esta historia:
Alain Bonnard ha heredado de su tío
Bernard la pasión por las grandes películas de todos los tiempos. Es por ello
que cuando su tío se retira del negocio, Alain recoge el testigo en el Cinéma
Paradis, uno de los pocos cines de barrio que quedan en París. Como propietario
del local y aficionado a las películas que allí mismo se proyectan, Alain llega
a conocer a todos los asiduos al cine. Entre ellos se encuentra la chica del
abrigo rojo que se sienta en la fila 17, una muchacha con la que no tarda en
congeniar. Pero cuando por fin Alain se sabe enamorado de ella… ¡la chica
desaparece! Su desaparición coindice con el comienzo del rodaje de una película
americana en el cine, ¿tendrá algo que ver? Sin duda, tendrás que leer este
libro para averiguarlo.
El protagonista y el narrador de esta
historia, Alain, ese chico que desoye a sus padres para seguir con los sueños
de su tío, dirige un insólito (por poco rentable) cine de barrio en el París
del siglo XXI. Las películas que en su sala se pueden ver no son recientes, no tienen
grandes efectos modernos, ni sonido envolvente; pero tienen su público, un
público muy selecto al que Alain, como decía antes, llega a conocer y a admirar,
¡incluso a amar! Pero, ¿quién le iba a decir a este muchacho que el amor de su
vida, esa chica que tan pronto llega como se va, iba a ser precisamente una de
sus clientas?
Me temo que la mayoría de las pequeñas y
viejas salas de cine, de esos pequeños templos que tanto nos han hecho soñar a
muchos, están avocadas a la desaparición hoy en día. Pero, ¿por qué no soñar
que pueda ocurrir algo que haga que se mantengan abiertas? Algo como lo que nos
propone Nicolas Barreau en esta historia, que no es otra cosa que el rodaje de
una película de un gran director americano (seguro que el nombre os resulta
familiar) protagonizada por una gran actriz francesa que hace mucho que se fue
a hacer las Américas.
Como en todas las novelas de Nicolas
Barreau, el equívoco, la confusión, el embrollo que nos mantendrá en vilo hasta
la última página, es inevitable. ¿Se resuelve satisfactoriamente? Por supuesto.
¿Os voy a adelantar yo algo? Rotundamente, no.
Todas las novelas de Barreau tienen
lugar en París, y ésta no podría ser menos. Lo que no pienso deciros es los
maravillosos lugares que vais a conocer en esta obra, solo os indicaré que una
buena pista la tenéis en la portada.
Gran parte de la narración tiene lugar
dentro o en relación al cinema Paradis, una sala antigua pero en funcionamiento
en la que se proyectan películas deliciosas. La lista completa, para los que
queráis verlas, se encuentra al final del libro. (Una selección excelente, a mi
parecer).
El cine y la literatura son buenos
amigos. Al fin y al cabo, todas las películas salen de un guion, que no es otra
cosa que una obra literaria. Ahora bien: ¿cuántos de vosotros os habéis
decantado en los últimos tiempos por quedaros en casa leyendo un buen libro
porque las buenas salas de cine en vuestra ciudad (o pueblo) han desaparecido y
no podéis (o no queréis) ir a ver una buena historia cinematográfica a un
triste centro comercial a las afueras? Seguro que muchos de vosotros, los
mismos que seguro que también recordáis con tanta nostalgia como yo aquellos
tiempos pasados de domingos en el cine y palomitas. Y si además me decís que
sois personas románticas, estoy segura de que disfrutaréis mucho con la lectura
de esta novela llena de malos entendidos, estrellas del cine y buenas película,
esta novela que precisamente intenta aunar estas dos pasiones, la del cine y la
literatura, en una. ¿Te atreves a darle una oportunidad?
Cristina Monteoliva