Queridos
amigos de La
Orilla de las Letras,
el
año avanza sin remedio y ya estamos en el mes de marzo. El invierno, para
algunos la época más propicia para las historias tenebrosas gracias al gran número
de horas de oscuridad y al frío, queda atrás, aunque el de este año esté siendo
más bien primaveral. Para otros, siempre es buen momento para leer historias de
terror. Historias de vampiros, por ejemplo.
Algunos
os preguntaréis a cuento de qué viene esta introducción, si lo que toca ahora
es una entrevista. Pues precisamente porque la autora que nos la ha concedido
en esta ocasión es Encarni López
Gonzálvez, una gran estudiosa de los vampiros literarios que recientemente
ha publicado el libro La metamorfosis
del vampiro. Características y evolución del personaje clásico (1819-1927).
Si quieres saber lo que nos ha contado, ya sabes, ¡no dejes de seguir leyendo
este artículo!:
¿Cuándo
comenzaste a interesarte por los vampiros?
En realidad siempre me han
gustado mucho los vampiros. De niña, eran los que más miedo me daban, los
vampiros y los espíritus, sobre todo la leyenda urbana de Verónica. Quizá por
eso siempre he sentido la necesidad de entender por qué, qué tienen los vampiros
que me asustaban tanto y, al mismo tiempo, me atraían. De pequeña, una de las
películas que más miedo me dio fue La danza de los vampiros, de Polanski,
y eso que es una comedia y por eso me dejaron verla… Y bueno, de una forma más
consciente, este interés se me afirmó durante la carrera; estudié filología
hispánica, y me encantaba el tema del romanticismo, sobre todo las vertientes
más oscuras del gótico y la literatura de horror de origen anglosajón, en las
que el vampiro tiene un lugar casi privilegiado. Y entonces empecé a
preguntarme cómo era posible que no hubiera ni una sola muestra de literatura
de vampiros en castellano, si la había en francés, en portugués, en italiano… Y
tuve la intuición que quizá era porque no habían sido estudiados de una manera
tan profunda. Y así, me decidí por el tema de mi máster.
¿Has
creído alguna vez en ellos?
En verdad no, ni siquiera
cuando más miedo me daban. ¡Y eso que me hubiera encantado creérmelo!
Para
ti, ¿qué hace que el vampiro literario sea más atrayente para los lectores que
otros monstruos o seres fantásticos?
La transgresión y su
carácter, sobre todo y, por encima de todo, humano. No hay en él, en realidad,
nada que lo vincule con una divinidad o un demonio. El vampiro es humano; al
menos, el vampiro clásico. Y esto hace que nos sintamos identificados por
completo con él, porque su monstruosidad, en verdad, viene como consecuencia de
sus actos y la marginalidad que conlleva su transgresión, que no tiene cabida
en la sociedad en la que se inserta, que por lo general no la entiende y la
rechaza. La transgresión del vampiro viene dada, a su vez, por tres ámbitos importantes:
el erotismo, la sociedad y la naturaleza. Esto es, la libre sexualidad, algo que
a todos nos atrae; romper los límites sociales y morales que nos “controlan” y,
por último, la inmortalidad del cuerpo. ¿A quién no le gustaría vivir para
siempre, con el cuerpo incorrupto, disfrutando plenamente de ello, sin límites
morales y sociales que controlen nuestro comportamiento? Pues, desde mi punto
de vista, ahí es donde está el origen de su atracción.
¿Cuándo
comenzaste a escribir La metamorfosis del
vampiro. Características y evolución del personaje clásico (1819-1927) y cuánto
tiempo tardaste en terminarlo?
El libro fue el resultado de la
investigación de un máster en literatura comparada que realicé en la
Universidad Nacional Autónoma de México, durante los años 2001 a 2005. Aunque el
proceso de escritura, después de la investigación y documentación, fue de 2003
a 2004, y el último año, de correcciones, hasta el examen que tuvo lugar en
noviembre de 2005. Y no ha sido sino hasta ahora que me atreví a rescribirla
para eliminarle en la medida de lo posible el tono académico y hacer un libro más
llamativo para un lector no forzosamente especializado en la investigación
literaria.
©
Encarni López Gonzálvez.
¿Qué
es lo más curioso que has encontrado durante la parte de documentación de este
libro?
Los informes oficiales de
vampiros que se desarrollaron a lo largo del siglo XVIII, sobre todo. Informes
oficiales, firmados y sellados por el emperador austrohúngaro, en los que se
especificaba, narraba y se documentaba todos los casos de “vampirismo” que
tenían lugar en la zona.
¿Qué
te animó a sacar La metamorfosis del vampiro.
Características y evolución del personaje clásico (1819-1927) del ambiente
más académico para darlo a conocer a un público general?
Creo que el vampiro, como bien
mencionabas un poco más arriba, es uno de los personajes o monstruos que más
interés suscitan en la ficción. Un libro que trate de conocerlos más a fondo,
sus características y su historia, de dónde viene y a dónde van, creí que podía
resultar interesante y enriquecedor, y hacerlo además de una forma amena que
pueda leer todo el mundo que esté interesado en el tema, a pesar de no ser
experto. Y, bueno, los vampiros, en el fondo, siempre están de moda, por
suerte.
La metamorfosis del vampiro.
Características y evolución del personaje clásico (1819-1927), como el propio título indica, encuadra
el estudio en un periodo de poco más de un siglo. ¿Por qué no un espacio de
tiempo más largo? ¿Habrá, tal vez, un segundo volumen que llegue hasta nuestros
días?
Lo que quise desde el
principio fue analizar el personaje clásico, que nace en 1819, con la primera
novela de vampiros, y que yo consideré que concluye en 1927, con la aparición
del cine sonoro. Porque, me parece, que hay un cambio en la concepción,
caracterización y tratamiento del personaje después del cine sonoro. Hay una presencia
muy marcada del cine en la representación del personaje después del cine
sonoro, desde mi punto de vista. Tanto que, la mayoría de las veces, sin pensarlo,
la primera imagen que nos viene a la cabeza cuando nos hablan de vampiros es el
Drácula de Bela Lugosi.
¿Y
por qué el libro solo se centra en la literatura anglosajona frente a la
hispanohablante?
Como mencionaba, era un
estudio comparado. Me centré en el idioma inglés, en primer lugar, porque es el
marco en el que nace el personaje. La primera novela de vampiros de Occidente es
de John W. Polidori y la publicó en 1819. Y elegí el idioma castellano porque
me interesaba estudiar la literatura de vampiros en mi lengua y mi cultura materna:
por qué no hay muestras o casi no las hay (según nos decían en la carrera) de
literatura gótica, de terror, horror y, específicamente, de vampiros. Y, bueno,
estas preguntas responden más a una escasez de estudios especializados que a
una ausencia de textos, en realidad. Claro que no es lo mismo que en la cultura
anglosajona, por los motivos que describo en el libro, pero de un modo
contextualizado, es igual de interesante y tiene la misma importancia en la construcción
de las literaturas modernas en castellano.
©
Encarni López Gonzálvez.
Por
cierto, ¿cuál sería tu vampiro literario favorito?
Drácula, of course.
¿Hay
futuro para el vampiro literario?
Siempre que haya este anhelo
transgresor humano, habrá vampiros. Así que le vaticino larga vida, obviamente
adaptándose a las nuevas circunstancias y contextos, pero siempre presente. Hay
excelentes propuestas al respecto, como la novela del sueco John Ajvide
Lindqvist, Déjame entrar, por ejemplo.
¿Qué
esperas que encuentren los lectores de La
metamorfosis del vampiro. Características y evolución del personaje clásico
(1819-1927)?
Una lectura amena en la que
aprender a conocer al vampiro, entender de dónde viene y adónde va, y una
posible respuesta al porqué nos fascina. Además, que se puedan conocer algunos
autores y textos, no tan famosos, que forjaron y trataron al personaje, tanto
en inglés como en la literatura en castellano, de la que tan poco se conoce.
¿Qué
nuevos proyectos literarios tienes en marcha? ¿Tal vez tu propia historia de
ficción de vampiros?
Sí, estoy trabajando en un
libro de cuentos que espero poder sacar próximamente. No hay vampiros, pero sí
mucha literatura de horror, que es de mis géneros favoritos.
¿Te
gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?
Muchísimas gracias por
contactarme, por la reseña y por tu atención. Espero que hayas disfrutado el
libro.
Muchas
gracias a ti, Encarni, por tu tiempo, tus palabras y tus fotos personales.
Gracias también por dar a conocer tu magnífico libro a los lectores, ¡que
esperamos que sean muchos!
Y
a vosotros, amigos de lectores, muchas gracias por estar una vez
más al otro lado de la pantalla.
Cristina Monteoliva