Título: La encrucijada del
roble
Autora: Elisabeth Crook
Traducción: Lorenzo Luengo
Publica: Ediciones Siruela
Páginas: 296
Precio: 21,95 € / 10,99 € (ePub)
¿Qué ingredientes creéis que debe tener
un buen western? ¿Indios y vaqueros?
¿Un temible forajido? ¿Un héroe? ¿Y qué me decís si os digo que acabo de leer
una que incluye todo esto, además de una épica persecución a un bello y a la
vez horrible animal? ¡Una novela sin duda de leyenda! ¿Qué cómo se llama? La encrucijada del roble, de Elisabeth
Crook. Y si quieres saber de qué va antes de decidirte por ella, no tienes más
que seguir leyendo esta reseña.
Tras el fin de la
Guerra de Secesión, el juez Edward H. Carlton ha de esclarecer ciertos crímenes
que tuvieron lugar durante los años pasados, como el ahorcamiento de ocho
viajeros en Julian Creek, no muy lejos de Verde Creek, lugar en el que el joven
Benjamin Shreve y su medio hermana Samantha, viven. El juez quiere saber si fue
Clarence Hanlin el que mató a aquellos hombres. Benjamin afirma que sí, pero
para justificar su testimonio ha de contarle al juez toda la historia a través
de numerosas cartas que irá escribiendo a lo largo del tiempo. Esta historia
nos habla de la dura vida de Benjamin y Samantha en el campo durante la guerra,
viviendo con su padre y la madre de Samantha, Juda, una ex esclava con la que
Benjamin nunca se llevaría bien. Una noche, vendría una pantera a la granja y
Juda moriría para salvar la vida de su pequeña, que tras el ataque de la fiera
quedaría gravemente marcada de por vida. Obsesionada con acabar con la pantera,
Samantha hará más tarde que su hermano, un singular mexicano de nombre Lorenzo
Pacheco, el predicador Beck y su perro cazador de panteras, se embarquen en una
emocionante y muy peligrosa aventura. Tras ellos, irá Clarence Hanlin, el
supuesto asesino de los hombres inocentes y sobrino del predicador.
¿Conseguirán cazar la pantera? ¿Y qué pasará con Hanlin? ¿Por qué Benjamin ha
de contar toda aquella historia para que el juez entienda que Hanlin es el
culpable?
Benjamin Shreve, el
narrador y uno de los protagonistas de esta épica historia que nos hace viajar
al estado de Texas en los años de la Guerra de Secesión y los tres posteriores,
es un muchacho inteligente que se ve arrastrado siempre por el ímpetu de su
hermana, una chiquilla obsesionada con acabar con la pantera que mató a su
madre y le desfiguró a ella la cara. A lo largo de las largas cartas que
Benjamin le escribe al juez Carlton, sabremos cómo los chicos acabaron viviendo
solos y a cargo de la granja, las ganas de Benjamin por adquirir una mejor
educación y todos los hechos que llevan al muchacho a afirmar que Clarence
Hanlin participó en el ahorcamiento de los pobres viajeros.
La otra protagonista
indiscutible de esta historia es Samantha, la chica indomable. Sam, pues así
prefiere ser llamada, es la medio hermana de Benjamin, una chica mulata marcada
por la pantera por dos veces: primero, físicamente, cuando le destrozó la cara;
y sentimentalmente, esa misma noche, cuando la fiera mató a su madre. Sam, a la
que Benjamin describe como una muchacha vaga y mal encarada, solo está dispuesta
a ponerse en marcha para cazar a la pantera. El paralelismo entre chica y pantera
queda claro desde el primer momento: ambas son dos auténticas fieras imparables
condenadas a enfrentarse. La cuestión es: ¿quién de las dos está destinada a
ganar la batalla final?
Todo ocurre en el
condado de Bandera, en Texas, un lugar en el que podemos encontrar indios
comanches, mexicanos en busca de fortuna, bandidos, panteras, valerosos
predicadores y niños obstinados. La acción tiene lugar en los años de la Guerra
de Secesión y tres años después de que la contienda terminara. Durante la
guerra, como descubriremos con esta lectura, muchos hombres fueron ajusticiados
por los sesesh, los soldados
secesionistas, por no estar de acuerdo con ellos. Tras la guerra, hombres como
el juez Edward H. Carlton deberán poner orden impartiendo justicia por estos
crímenes.
La
encrucijada del roble, en definitiva, es un magnífico western
capaz de dejar sin aliento incluso a los lectores más recelosos. Adéntrate
ahora en sus páginas y conoce una historia única, una gran aventura en una
época salvaje e indómita de la mano del joven Benjamin, siempre al cargo de la
sin igual Sam, y descubre qué pasó con el forajido Hanlin, con Pacheco, con su
tío el predicador, con los niños y la pantera. ¿O es que acaso tienes miedo de
que esta magnífica fiera te deje marcado? Creedme, lo hará. Pero, en este caso,
para bien.
Cristina Monteoliva
©
Cristina Monteoliva.