Título: Metro 2033
Autor: Dmitry Glukhovsky
Traducción: Joan Josep Musarra
Roca
Publica: Timunmas
Páginas: 544
Precio: 19,50 € / 8,95 € (edición de bolsillo) / 6,99 € (Epub2)
Imagina que se desata la III Guerra
Mundial y que los dirigentes de los países involucrados en tan terrible
contienda ordenan a sus soldados dejar caer las bombas nucleares sobre las
ciudades enemigas. ¿Dónde podrían refugiarse los pobres civiles para escapar de
la radiación? Sin lugar a dudas, en las líneas del metro. Allí crearían nuevos
asentamientos humanos, nuevas formas de organizarse: un nuevo mundo. Pero, ¿y
si ese nuevo mundo se viera de pronto amenazado por algo tan horrible como las
radiación? La respuesta a esta pregunta y muchas otras la encontraréis en la
obra de ciencia ficción Metro 2033,
de Dmitry Glukhovsky: la novela que hoy os vengo a comentar.
Moscú, año 2033. Hace
años que la gran capital rusa fue devastada por las bombas nucleares. Desde
entonces, los supervivientes a la guerra y la radiación viven en el subsuelo,
ocupando las estaciones del metro, convertidas en pequeñas ciudades Estado.
Artyom es un joven soldado que vive con su padre adoptivo en la estación
denominada VDNKh. Su trabajo consiste en vigilar para evitar la entrada de los Negros,
unos terribles seres del exterior. Los Negros están a punto de entrar en masa y
Artyom es el elegido para alertar a los habitantes del metro del peligro que
corren. Para evitar el gran desastre, deberá viajar hasta la Polis, una
estación lejana, y buscar ayuda allí. El viaje no solo será largo, sino también
peligroso. Y terriblemente emocionante. ¿Conseguirá al final Artyom impedir que
su mundo se venga abajo?
Los amantes de la
ciencia ficción y de los futuros distópicos somos muy datos a pensar en
explicaciones imaginativas cuando se trata del fin del mundo. Lo cierto, sin
embargo, es que la explicación más plausible para el fin de la humanidad, tal y
como la conocemos, es la misma que ya sabemos desde hace mucho: la guerra biológica
y nuclear. Y así, lejos de hablarnos de zombis o alienígenas, Dmitry Glukhovsky
nos plantea en Metro 2033 un futuro
en el que los moscovitas supervivientes a las bombas nucleares que han asolado
la superficie viven en agrupados en las distintas estaciones del metro,
convertidas en pequeñas ciudades Estado en las que se profesan distintas
ideologías, religiones y se realizan distintas funciones.
Pero, un momento, ¡que
estamos hablando de ciencia ficción! ¿Es en este mundo todo como cabría
esperar? No, por supuesto que no. En el metro ocurren cosas que tienen difícil
explicación, y en la superficie no solo viven los Negros, unos seres de piel
oscura que se comen a los habitantes de las vías, sino también otros seres
nacidos de la radiación. Y aún hay más. Porque la guerra que devastó este Moscú
hipotético no solo fue nuclear: también tuvo su parte biológica. ¿Y qué pasaría
con los restos de estas armas después del tiempo? Tendrás que leer Metro 2033
para descubrirlo.
Dicho todo esto,
hablemos Artyom, el joven protagonista de esta novela de aventuras subterráneas
y un tanto claustrofóbicas. Artyom es un muchacho, casi un adolescente, que
trabaja vigilando el túnel por el que normalmente los Negros llegan a su
estación. Cuando era pequeño, vivía en la superficie, aunque no lo recuerde.
Tampoco se acuerda de su madre, la mujer que, desesperada, le entregó en medio
de un horrible ataque de ratas gigantes a Sukhoy, el hombre que se convertiría
a partir de entonces en su padre adoptivo. Artyom no ha conocido otra familia
desde entonces, tampoco otra casa que no sea la VDNKh, ahora amenazada por los
terribles monstruos. Por eso, en cuanto el misterioso Hunter le manda a la
Polis en busca del comandante Melnikov, el chico no se lo piensa dos veces.
El camino será largo y
no solo estará repleto de personajes interesantes desde distintos puntos de
vista y peligros inimaginables, sino también de momentos enriquecedores para alguien
como Artyom, tan ávido de nuevos conocimientos. Todo lo que el joven aprenda le
hará crecer y, de paso, no dejará indiferente al lector. Juntos llegaremos al
sorprendente final de esta novela para comprender que… No, eso tendréis que
averiguarlo por vosotros mismos. ¿O es que no os pica la curiosidad?
Metro
2033,
en definitiva, es una novela de ciencia ficción y fantasía llena de aventuras y
momentos emocionantes, pero también de planteamientos que harán que los
lectores no solo nos preocupemos por ese futuro hipotético en el que vive el
joven Artyom, sino también, y mucho, por el presente, la forma que tenemos de
relacionarnos los unos con los otros, las disputas de todo tipo, la
intolerancia, el papel de las creencias y un sinfín de temas interesantes. ¿Te
atreves a explorar el metro de Moscú junto a este muchacho? Yo que tú ni me lo
pensaría.
Cristina Monteoliva