Queridos
amigos de La
Orilla de las Letras,
por
fin podemos ofreceros la entrevista que nos ha concedido la escritora Lydia Rodríguez Sánchez, autora que empezó
su carrera profesional en la enseñanza
de idiomas en una academia, se dedicó al comercio exterior y finalmente al transporte internacional. El inicio de su jubilación la llevaría a
escribir relatos cortos que, de momento, no ha recopilado en un libro. En
cambio, sí ha publicado las novelas El
último sendero y Aquel otoño.
Dicho
esto, vamos con las palabras de nuestra autora:
¿Cuándo
comenzaste a escribir?
Durante mi adolescencia y temprana
juventud, sentía la necesidad de plasmar todas mis emociones por escrito. No
era un diario, simplemente daba rienda suelta a mis pensamientos y emociones.
Era como una válvula de escape. Ya, más entrada en edad, dejé esa costumbre.
Cuando me
llegó la hora de la jubilación hace casi cinco años, visualicé cómo iba a ser
esta nueva etapa después de “toda una vida” de mucha actividad. Tenía claro que
no me iba a conformar solo con una vida contemplativa, de reposo, sino que
quería tener objetivos para mantener mi mente activa. Se me ocurrió que podría
añadir a mi pasión por el senderismo/montañismo, mi antigua ilusión por la
escritura. Esto significaba lanzarme a una nueva aventura, pero sin más
pretensiones. Escribí relatos cortos hasta que, un día, me decidí a intentar
escribir una novela corta, que culminó con la publicación de El último sendero. El proceso de la
redacción fue tan enriquecedor, que me propuse escribir otra novela, Aquel otoño.
©
Lydia Rodríguez Sánchez
¿Qué
lecturas crees que te han influenciado como escritora?
No podría nombrar una sola lectura
o un solo escritor. Es un cúmulo de todo ello. A lo largo de mi juventud tuvo
mucho peso la novela Germinal de
Emile Zola. También Albert Camus, Jean Paul Sartre, Louis Guilloux, Hervé
Bazin, Gilbert Sigaux, Elsa Triolet, A la edad ya más madura, Jean Giono ha
tenido mucho peso y lo sigue teniendo, así como Le petit prince de St Exupéry.
En cuanto
a lectura en español, la novela La lluvia
amarilla de Julio Llamazares, El
túnel de Ernesto Sábato.
Habría
muchos más, pero quiero recalcar que la influencia que me han aportado los
autores de mi primera etapa ha sido la reflexión sobre la vida misma con sus
luchas, penurias, alegrías, tristeza. En cuanto a la segunda, psicología,
poesía, amor a la naturaleza.
¿Qué
estás leyendo ahora mismo? ¿Nos lo recomendarías?
Tengo tres en estos momentos:
1.- La última función de Luis Landero.
Lectura para el club de lectura que acabo de terminar. Muy recomendable. Una
narrativa muy cuidada. Los temas tratados te invitan a reflexionar sobre la
vida misma, el paso del tiempo, los anhelos, las frustraciones, y sobre todo la
tenacidad de una persona ante sus sueños.
2.- El hijo del padre de Víctor del Árbol:
hacía tiempo que lo tenía pendiente. Aunque es bastante crudo en cuanto a la
psicología de los personajes, el autor sabe sumergirte en una historia de
varias generaciones. Lo recomiendo también a los lectores a quienes les guste
los conflictos familiares con fuertes rasgos psicológicos.
3.- The great Gatsby de F. Scott Fitzgerald
(edición resumida para el club de lectura en inglés). Considerada una de las mejores novelas americanas del siglo XX. Acabo
de empezarla, por lo que no puedo pronunciarme.
¿Dónde
encuentras la inspiración?
En mi primera novela, en las
montañas y en la naturaleza en general. Soy una apasionada del senderismo y
montañismo desde los veinticuatro años, por lo que me resultó apasionante
ambientarla en ese entorno. En cuanto a la inspiración de los personajes, es
totalmente ficción, pero recojo muchas de mis sensaciones, sentimientos y
emociones vividas durante mis escapadas a la montaña. De hecho, al jubilarme,
quise hacer realidad mi sueño y me fui con mi pareja un año a la sierra. Ahí
fue reconectar conmigo misma y durante ese periodo, fragüé la novela.
En cuanto
a la inspiración en general, creo que no se puede hablar de una sola fuente. Es
como un puzle donde se mezclan una multitud de piezas. Buscas la que más te
puede interesar en ese momento, e imaginas una historia basándote en tu entorno
y le das forma con el apoyo de tu imaginación. A partir de ahí, dejas aflorar
las emociones que te van indicando cada personaje.
¿Escribirías
una novela de moda por dinero?
Escribo por placer. La escritura
es un camino en solitario donde tus personajes toman vida. Tu entorno
desaparece mientras que escribes. Vas a donde te llevan ellos, tú desapareces.
Durante el proceso, mientras que escribes, el mundo está en sus manos con sus
anhelos, frustraciones, éxitos, dolor, alegría. Si tuviese que escribir por
dinero, tendría que ser un tema que sintiese y pudiese desarrollar desde las
entrañas. Si no fuese así, rotundamente NO.
¿Qué
género literario te atrae menos como escritora?
El terror, la ciencia ficción. Considero
que hay bastante miseria en el mundo como para leer historias de miedo
inventadas.
Eres
una autora que ha comenzado a publicar después de la jubilación. ¿Qué consejo
le darías a alguien que quisiera escribir su primera obra en circunstancias
similares?
En primer lugar, que siga su
objetivo, que no dude en empezar a escribir. Que no tenga miedo. El intento en
sí es un logro, aunque no consigas materializar el objetivo.
¿Qué
supuso para ti publicar El último sendero?
Como he dicho anteriormente, fue
un proceso muy enriquecedor. Afloraron muchas emociones, aunque se trataba de
una novela de ficción. Por otra parte, me supuso concentrarme mucho, obligarme
a meterme en la piel de los personajes. Debes hacer mucho ejercicio mental y
esto es lo que quería, no perder la costumbre para mantener el cerebro lo más
activo posible.
¿Qué
vamos a encontrar en esta novela?
Reflexión acerca de la dificultad
de comunicación de una madre con su hija.
Reflexión
de una hija que descubre a una madre como persona a través de unos diarios y la
posterior transformación de su personalidad.
Amor a la
naturaleza y más concretamente a las montañas.
Empatía.
Misterio.
Amor.
Háblanos
de tu última novela publicada, Aquel
otoño.
La reseña de Laivetobooks, a mi
punto de vista refleja la esencia de la novela con mucho acierto. Por lo tanto,
voy a compartir una parte: “Adriana y Patricia serán nuestras dos
protagonistas. La vida de cada una de ellas transcurre en una línea temporal totalmente
distinta, aunque ambas y, por razones que desconocemos, están completamente
ligadas: una no puede existir sin la otra. Adriana está pasando por una
situación delicada al encontrarse dentro de una relación tóxica con constantes
malos tratos que la destinan a sufrir la mayor pérdida posible. Por otro lado,
Patricia es una mujer de edad avanzada que se retira a vivir, junto con una
bebé, a un pueblo prácticamente deshabitado si no fuera por Ángel y Juan, dos
vecinos que mantienen una relación muy tensa entre ellos. Patricia intentará
pasar totalmente desapercibida por el bien de la pequeña Esperanza, pero no se
lo podrán nada fácil.
Dos
historias que convergen en una. Dos mujeres tocadas y hundidas que buscan salir
a flote. Una trama sencilla, directa y emotiva; en muchos momentos intimista y,
en otros, misteriosa”.
©
Lydia Rodríguez Sánchez
¿Qué
esperas que encuentren los lectores en Aquel
otoño?
Mucha carga emotiva. Superación,
misterio, pasión, amor, reflexión sobre la felicidad. Descubrimiento del
despoblamiento rural. Esperanza y búsqueda del perdón a uno mismo.
¿Qué
nuevos proyectos literarios tienes en marcha?
He empezado una nueva novela
ambientada en la transición española.
Por otra
parte, un relato corto para una antología que publicará Objetivo Libros.
A largo
plazo, recopilación de varios relatos míos en una antología.
¿Te
gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?
Quiero darte las gracias por esta
entrevista. Haces un trabajo estupendo y desinteresado, dando visibilidad a autores
noveles como yo. Teniendo en cuenta que tú también eres escritora, es de
elogiar tu implicación. El proceso de la escritura es un camino solitario, por
lo que, si recibes apoyo de compañeros como lo haces tú, es de alabar. Te deseo
lo mejor como escritora.
También
quiero aprovechar esta entrevista para agradecer la labor de divulgación y de
apoyo de Objetivo Libros respecto a sus asociados. Mencionar también la
importancia que tienen las asociaciones de escritores para los escritores
noveles.
Muchas
gracias, Lydia, por tu tiempo, tus
respuestas y tus fotos personales. Te deseamos una carrera literaria muy
fructífera.
Y
a vosotros, amigos lectores, gracias
por estar un día más al otro lado de la pantalla. Ahora, ¡a leer!
Cristina Monteoliva