Queridos
amigos de La Orilla de las Letras,
volvemos
a la carga con nuestras entrevistas, esta vez con la que nos ha concedido el
autor Diego M. B. Domínguez.
Diego M. B. Domínguez es
graduado en Periodismo por la
Universidad Rey Juan Carlos y Máster en Comunicación Audiovisual de Servicio
Público por la UNED. Desde el año 2008 tuvo la oportunidad de pasar por diferentes medios digitales de temática
deportiva tanto de España como de Latinoamérica. Posteriormente vivió el
mundo de las letras desde otra perspectiva, trabajando varios años para una editorial de contenido formativo. En
enero de 2023 inició una nueva etapa, lanzándose al mundo literario. Su primera
novela fue La última misión, una
historia de viajes en el tiempo. Más tarde llegó Qub1k, un thriller tecnológico con tintes policiacos y de
ciencia-ficción. Ahora presenta al público su tercer trabajo: El juego del tren.
Dicho
esto, aquí os dejo con el artículo:
¿Cuándo
comenzaste a escribir?
Tengo la
suerte de venir de una familia en la que, desde el principio, se le dio mucha
importancia a la literatura y a la escritura. En ese sentido me vi rodeado de
libros, revistas, periódicos, cuadernos, lápices… Y se me invitó no solo a leer
sino también a experimentar y a escribir. La verdad es que si echo la vista
atrás, siempre me he visto escribiendo o contando historias.
¿Y
cuándo descubriste que la escritura era algo más que un pasatiempo?
Probablemente por aquella época.
Si te soy sincero, creo que desde pequeño tuve claro que quería dedicarme al
mundo del periodismo porque me parecía una forma perfecta de intentar ganarme
la vida escribiendo. Más que la radio o la televisión, siempre quise estar en
la redacción de algún periódico redactando artículos.
©
Diego M. B. Domínguez.
¿Qué
lecturas crees que te han influenciado como escritor?
Como te he comentado al principio,
desde siempre me he visto rodeado de toda clase de libros. Gracias
especialmente a mi madre, he tenido la oportunidad de leer obras de una gran
cantidad de autores que creo que, de un modo u otro, me han acabado marcando.
Considero que para escribir es imprescindible contar con cierto bagaje
literario. Te diría que entre los autores que más me han podido marcar estarían
Arturo Pérez-Reverte, Eduardo Mendoza, Juan Eslava Galán, Terry Pratchett,
Michael Ende, Robert Graves… Soy consciente de que es una utopía pensar que
pueda llegar a acercarme a su nivel, tampoco es algo que pretenda, pero creo
que en sus obras se tratan determinados temas o preocupaciones que sí han
podido influenciarme a la hora de escribir.
¿Qué
estás leyendo ahora mismo? ¿Nos lo recomendarías?
Ahora mismo estoy leyendo la
última novela de Edine Mull, La rosa de
Skye. Estoy disfrutando bastante de lo que llevo del libro. Lo recomiendo
sin duda: ella tiene una forma de narrar muy cuidada y, además, consigue que te
metas de lleno en la historia.
¿Cómo
compaginas tu trabajo como periodista con la escritura?
Por circunstancias personales
llevo un tiempo un poco alejado del mundo del periodismo deportivo, que ha sido
el ámbito al que me he dedicado profesionalmente. Sí hubo una época en la que
compaginé ambas facetas y, la verdad, es que no fue demasiado complicado porque
como a mí me gusta decir, el periodismo no es más que literatura hecha con
prisas. Todo es cuestión de organizarse. Me ha aportado rutinas y hábitos que
me han llevado a escribir mis libros como lo hago ahora mismo.
¿Qué
has aprendido trabajando en editoriales?
La experiencia trabajando para una
editorial fue diferente a las que había tenido hasta entonces pero muy
enriquecedora. A fin de cuentas acabé elaborando manuales sobre una gran
cantidad de temas que, muchas veces, no tenían demasiado que ver con mi área de
conocimiento. En ese sentido fue un auténtico reto porque no solo tenía que
localizar información sobre esos temas con rapidez, sino que me tocaba
familiarizarme con ella de manera adecuada para después transmitirla
correctamente en lo que tenía que escribir. Fueron años bastante intensos, en
los que aprendí bastante.
¿Escribirías
una novela de moda a cambio de hacerte famoso?
Lo primero que se me viene a la
cabeza es citar al gran Fievel Ratonovich, que dijo aquello de nunca digas
nunca. Sin embargo, la verdad es que lo veo bastante complicado porque para mí
la escritura tiene un punto lúdico que es determinante a la hora de abordar
cualquier proyecto. Necesito divertirme mientras estoy escribiendo algo, de lo
contrario soy incapaz de juntar más que un puñado de palabras. Además, tengo
comprobado que cuando me divierto es cuando soy capaz de transmitir
verdaderamente todo lo que quiero al lector.
¿Por
qué te has decantado por la autopublicación en Amazon a la hora de dar a
conocer tus obras al público?
Mi primera
experiencia literaria la viví de la mano de una editorial con la que, digamos,
no fue la cosa excesivamente bien. Entonces, cuando me dispuse a lanzar mi
segundo trabajo, tuve claro que quería explorar la fórmula de autopublicar a
través de Amazon. A día de hoy, tengo que reconocerte que estoy bastante
satisfecho con la decisión que tomé en aquel momento. Todos mis libros están, ahora
mismo, autopublicados en esa plataforma.
Sí es cierto que es bastante más laborioso porque me toca encargarme de
una serie de procesos que difícilmente vería estando con una editorial, pero ha
sido muy enriquecedor. Además, me ha permitido probarme a mí mismo y descubrir
que soy capaz de sacar adelante determinados pasos que, desde un punto de vista
mental, al principio se me hacían un poco cuesta arriba.
Tu
última novela publicada es El juego del
tren. ¿Qué vamos a encontrar en este libro?
El
juego del tren es una novela corta que se desarrolla
íntegramente en el trayecto ferroviario que une Madrid y Granada. El protagonista
es un escritor autopublicado que vuelve a casa tras haber participado en un
evento literario. A poco de comenzar el viaje entra en contacto con una
pasajera un tanto particular con la que entabla conversación sin saber que como
consecuencia de ello acabará viéndose obligado a participar en un juego macabro
y letal. Y es que, en última instancia, tendrá que tomar una decisión que
parece imposible: elegir entre salvarse a sí mismo o al resto de personas que
se encuentran en el tren. Más o menos, sin hacer demasiados spoilers, el libro
gira en torno a esto.
¿Qué
tiene de ti El juego del tren?
En este caso, al contrario que mis
anteriores novelas, podría decirse que hay bastantes cosas de mí en este libro.
Tanto el protagonista como yo somos autores autopublicados, los dos vivimos en
Granada, el evento en el que él ha participado es en Móstoles porque durante
muchos años viví allí… También hay referencias a trabajos míos ya publicados o
que tengo intención de publicar en un futuro siempre que tenga la suerte de
seguir engañando a los lectores para que me lean. O, por ejemplo, uno de mis
mejores amigos aparece en el transcurso de la novela. Al final, mientras la
estuve escribiendo, consideré adecuado tirar de situaciones que he vivido para
hacer una especie de ejercicio de autoficción.
¿Qué
esperas que los lectores aprendan de El
juego del tren?
Bueno, tengo que decirte que mi
intención cuando escribí la novela era la de hacer que el lector se metiera
desde el principio en el juego. Que sintiera como propia la inquietud del
protagonista ante la decisión que debe tomar y que se planteara qué haría de
estar en su situación. A partir de ahí, sí es cierto que en la novela hay una
serie de reflexiones sobre la existencia, las casualidades o el destino que
creo que son interesantes en estos tiempos que corren.
¿Qué
nuevos proyectos literarios tienes en marcha?
La verdad es que en ese sentido me
gusta estar siempre bastante activo. Por un lado, tengo en marcha lo que sería
todo el proceso de promoción y difusión de El
juego del tren que me va a permitir hacer distintas presentaciones por
varias localidades de la provincia de Granada. Por otro lado, estamos en pleno
proceso de revisión de un nuevo trabajo que me gustaría publicar a primeros de
2025, titulado El inexplicable suceso del
Monte del Vigía. Y, al mismo tiempo, estoy dándole forma a otro proyecto un
poco más breve que gira en torno a Caronte. Me apasiona escribir y no suelo
estar mucho tiempo parado.
¿Te
gustaría añadir algo antes de terminar esta entrevista?
Lo primero de todo, darte las
gracias a ti por la amabilidad, el interés y el tiempo que te has tomado para
entrevistarme. Y luego, me gustaría aprovechar para hacer una pequeña petición
a todo aquel que tenga a bien leer esta entrevista: si en algún momento lee
alguna novela mía o de algún compañero y le gusta, por favor que la recomiende
a su círculo más próximo o que haga una reseña en cualquier plataforma de las
que tanto abundan en Internet. Son pequeños gestos en los que muchas veces no
caemos, pero que ayudan bastante a que a lo mejor cualquier otro lector esté
dispuesto a darle una oportunidad a una novela.
Muchas
gracias, Diego, por tu tiempo, tus
respuestas y tus fotos personales. Te deseamos una carrera literaria larga y
fructífera.
Y
a vosotros, amigos lectores, gracias
por estar un día más al otro lado de la pantalla. Ahora, ¡a leer!
Cristina Monteoliva