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jueves, 21 de diciembre de 2023

Reseña: CUANDO LLEGUE EL APOCALIPSIS, de Cristina Monteoliva.

 

En el imaginario colectivo el Apocalipsis tiene mil formas dependiendo de si hacemos caso a la profecía de turno, a la Biblia, a los referentes cinematográficos o literarios o si nos centramos en las posibilidades reales derivadas del cambio climático o el agotamiento de los recursos naturales del planeta. Zombis, un meteorito, una invasión alienígena, un virus… son algunas de las muchas posibilidades si lo entendemos como el final del mundo tal y como lo conocemos, porque también es cierto que cada uno de nosotros tiene su propio apocalipsis. Esa situación en la que sentimos que la tierra se hunde bajo nuestros pies o desearíamos que ocurriera así. Aunque lo que nos ocurre no esté a la altura de una hecatombe mundial la sentimos así: es nuestro particular cataclismo.

         En Cuando llegue el apocalipsis, el último libro de Cristina Monteoliva, encontramos doce relatos muy peculiares sobre otros tantos desastres individuales o colectivos. Grandes catástrofes a escala mundial o pequeñas tragedias personales que no trascienden los muros de las viviendas de sus protagonistas, todo cabe en la docena de piezas de extensión variable que conforman esta obra. En ellas encontramos humor pero también impotencia y desesperación. Historias de ficción, algunas del todo surrealistas, codeándose con la contundencia de situaciones que nos son mucho más cercanas y tienen que ver con pandemias mundiales, que tan frescas tenemos en la memoria, o la desorbitada subida de los precios de todo que nos toca vivir a diario. El horror de lo simple y cotidiano frente a los desastres a escala universal.

         En cada una de las líneas de estos relatos encontramos a la Cristina Monteoliva más auténtica y genuina, la misma que nos interpela en sus redes sociales para que leamos sus libros o solo para sacarnos una sonrisa. Aquí hallamos buena parte de su imaginario más personal, de sus miedos, sus preocupaciones y sus fantasías más extravagantes. El libro comienza con un homenaje a la gran escritora Shirley Jackson por la que Monteoliva siente verdadera admiración, dedicándole un relato que es un juego de espejos con final sorpresivo. Tampoco podía faltar en este libro un relato sobre zombis: quienes conocen a la autora saben lo mucho que le gusta esta temática.

         Es este un libro entretenido de temáticas variadas, en las que el tono con el que cada uno de ellas se aborda también es muy diferente. Algunos, como indica la autora, son versiones actualizadas de esos mismos relatos aparecidos anteriormente en otros medios. La sensación que tiene el lector, si ya ha leído algún otro libro de esta autora, es que la granadina ha crecido como escritora, que ha madurado y en Cuando llegue el apocalipsis nos ofrece la mejor versión de su escritura. Han pasado un par de años desde la publicación de Gatitos, su última novela, y se observa una importante evolución en el estilo de Monteoliva. Con todo, merece la pena asomarse a esta obra para pasar un rato entretenido o para estar prevenidos en caso de que llegue el apocalipsis.

María Dolores García Pastor