Título: Mujer entra por la
izquierda
Autora: Jessica Brockmole
Traducción: Pablo Sauras
Publica: Alba Editorial
Páginas: 344
Precio: 19,90 €
Toda buena historia de carretera ha de
albergar en ella una búsqueda. Aunque muchas nos intentan engañar mostrándonos
como objetivo final algo físico o, al menos, concreto, lo cierto es que lo que
los personajes se encuentran al final del camino es con ellos mismos, con su
verdadera esencia. Personajes ricos en matices, dudas y culpas. Como las
mujeres de la novela de carretera por partida doble, o más bien triple, de la
que hoy hablaremos: Mujer entra por la
izquierda, de Jessica Brockmole.
Los Ángeles, 1952. Louise
Wilde es una actriz de películas musicales de serie B a la que Florence Danields,
una guionista reputada, ha dejado una importante herencia. Una vez en el
apartamento de Florence, Louise descubre un buen número de guiones de corte
feminista. Entre ellos destaca especialmente uno en el que dos mujeres recorren
juntas el país de un extremo al otro. El descubrimiento de este guion y su
incapacidad para hacer que su marido, Arnie, supere su vuelta de la guerra de
Corea, hacen que, en vez de viajar en su coche hacia Las Vegas, lugar en el que
la esperan para rodar una nueva película, Louise decida perderse por las
carreteras, en un viaje inverso al que recorrerían las mujeres del guion que
tanto le atrae, que no eran otras, en realidad, que Florence y Ethel, su madre.
Y es que Louis no lo sabe, pero Florence fue una vez la mejor amiga de su
madre, una amiga que no dudó en dejar que Ethel viajara con ella hasta Nevada
cuando Carl, el padre de la que un día sería una actriz cotizada, se llevó con
él a su pequeña con la intención de conseguir el divorcio y la custodia de su
hija. Tampoco que ambos viajes, aunque en sentido contrario, tendrán mucho en
común.
Nuestra historia
comienza en Los Ángeles con una actriz de segunda que no está contenta ni con
los papeles que interpreta últimamente ni con el comportamiento autodestructivo
de su marido, siempre encerrado en casa desde que volviera de ejercer como
reportero en la Guerra de Corea. Nuestra mujer, Louise Wilde, recibe de pronto
una herencia de una guionista de la que no sabía nada hasta entonces, Florence Danields,
pero de la que poco a poco irá conociendo prácticamente todo.
Inconscientemente, emprende un viaje de autoconocimiento recorriendo el camino
inverso que hicieran Florence y Ethel en 1926, cuando Carl, el padre de Louise,
se llevara a su hija sin permiso materno con la intención de conseguir el
divorcio en Nevada.
Por otro lado, nos
encontramos con la historia del viaje en 1926 de Florence, Florrie, y Ethel. Si
bien la historia de Louise se nos presenta como una narración en tercera
persona, las de su madre y su benefactora nos las encontraremos como dos
diarios con dos estilos particulares distintos. Gracias a ellos, veremos no
solo la evolución del viaje, lleno de paradas en campings, comidas a veces poco
copiosas e infortunios varios, sino también la de la relación entre dos
mujeres, una fuerte y otra en apariencia no tanto; una que esconde un amor
secreto y la otra que ha estado ciega durante toda su vida con respecto a los
sentimientos de los demás.
Mujer
entra por la izquierda es una novela con una muy buena
ambientación, producto, sin duda, de un gran trabajo de documentación. En ella,
se nos presentan dos épocas distintas: el periodo de entreguerras y el de los
años cincuenta de siglo XX, una época, esta segunda, marcada en Los Ángeles por
la persecución de todo aquel que pudiera ser sospechoso de ser comunista. Además
de este tema, se nos presentarán otros muy interesantes, como la Guerra de
Corea, la curiosa forma que la gente podía obtener el divorcio en los años
veinte del siglo pasado en Estados Unidos o los casos de intoxicación de
trabajadoras del sector relojero por radio. El tema principal de la historia, o
al menos uno de ellos, será otro, sin embargo: las relaciones entre personas
del mismo sexo en épocas en las que la homosexualidad era un gran tabú.
Mujer
entra por la izquierda es, en definitiva, una excelente
novela de carretera con la que descubrir dos épocas diferentes con sus paisajes
físicos, urbanos y sentimentales. Una obra sobre los sentimientos más secretos
así como las mentiras familiares están muy presentes, así como el cine, en
todas sus formas. Una historia sobre grandes mujeres, realmente entrañable, que
está esperando a que la descubras. ¿Te atreverás a emprender este viaje?
Cristina Monteoliva
©
Cristina Monteoliva.