¿Cuándo
comenzaste a escribir?
Muy pronto. A los siete
años.
¿Cuándo
empezaste a interesarte por los premios literarios?
A raíz de un anuncio que me trajeron unos amigos de Castellón y
que salía publicado en El País. Se
trataba de un premio de novela corta convocado por la Comisión de Cultura del
Alto Almanzora y el Ayuntamiento de Olula del Río. Tuve la suerte de ganar.
Después me presenté a un premio de relatos y a otro de novela convocado por una
editorial y también gané. Pensé que era
muy sencillo, pero pronto comenzaron las derrotas.
¿Cuál fue el
primero que ganaste? ¿Y el último?
El primero, el que he reseñado antes. El último ha sido el
Premio de Narrativa en Castellano Valencia 2015, convocado por la Institución
Alfons el Magnanim, que me concedieron hace unos meses por mi novela Mi otra madre.
Tienes en tu
haber un buen número de premios literarios. ¿Cuál es el que más te ha costado
conseguir?
No hay ninguno que me haya costado más ni ninguno que me haya
costado menos. Y todos me ilusionan del mismo modo.
¿Qué consejo te
hubiera gustado que alguien te diera cuando comenzaste a participar en
concursos literarios?
Que no me desanimara. Los jurados de cada premio son distintos,
no están en posesión de la verdad absoluta y se rigen por criterios más o menos
subjetivos. Hay que estar preparado para perder muchas veces. El triunfo lleva
implícita la derrota.
¿Es más fácil
convencer a los jurados con una novela o con un relato?
Son dos géneros distintos aunque existan entre ambos elementos
comunes. En los premios de novela se presenta menos gente que en el de relatos
donde las participaciones que superan el millar son frecuentes. Cuando hablas
del «Jurado», no se trata de un ente genérico, así que tampoco se puede dar una
respuesta general.
Si fueras jurado
de un concurso literario, ¿en qué te fijarías más?
En la originalidad, en la credibilidad, en el estilo, me fijaría
mucho en el estilo, que es la personalidad del escritor, en la sobriedad de la
estructura, en los errores.
Pero sobre todo, si tengo que seleccionar entre muchas obras, me
fijaría en el comienzo. En el primer párrafo.
¿Crees que los
talleres literarios ayudan a los escritores a enfrentarse a los concursos?
Los talleres literarios permiten que el escritor adquiera la técnica,
trabaje de la mano del profesor y evite los errores frecuentes entre quienes
empiezan. Existe una relación directa entre mejorar el estilo y conseguir
premios. Eso es innegable.
¿Cómo surgió la
idea de escribir Manual de escritura
creativa y premios literarios?
Vino casi inducido por los talleres que realizo desde hace años.
En realidad el manual responde a las inquietudes de mis alumnos y supone una
guía ágil, de fácil lectura o consulta para quienes empiezan a escribir y a
concursar.
¿Qué tiene Manual de escritura creativa y premios
literarios que lo diferencia de otros libros sobre escritura que hay ahora
mismo en el mercado?
Existen muy buenos manuales de escritura creativa en el mercado.
Muy completos y con gran cantidad de ejemplos en los que el lector puede
profundizar. Mi manual aborda también el proceloso mundo de los premios
literarios con recomendaciones para quienes deseen concursar.
¿Por qué
deberían los escritores noveles (o no tan noveles) hacerse con un ejemplar de Manual de escritura creativa y premios
literarios?
Porque se trata de una guía sencilla y práctica, que no necesita
de una gran lectura para mejorar rápidamente.
©Vicente Marco
¿Qué nuevos
proyectos literarios tienes en marcha?
Estoy, como siempre, escribiendo una nueva novela. Y en los
intersticios creativos, mientras la novela duerme, trabajo dramaturgia o
relato. Pero ese es mi modus operandi
desde que era pequeño.
¿Te gustaría
añadir algo más antes de terminar con esta entrevista?
Solo desearía animar a los miles de escritores que, —como yo en
el pasado—, se encuentran agazapados. Estoy seguro de que «la obra maestra de
la literatura», duerme en el cajón de alguno de estos autores cuya inseguridad
los relega injustamente a las sombras. Es verdad que la escritura supone una catarsis,
y que el proceso aunque costoso resulta placentero, y quizá eso ya justifique
escribir. Pero en mi opinión hay que salir y mostrar. El placer del escritor es
completo cuando lo leen. Cuando saborea las mieles del reconocimiento.
Muchas
gracias, Vicente, por tu tiempo, tus palabras y tus fotos personales. Espero
que Manual de escritura creativa y premios literarios llegue a mucha gente y
que pronto te veamos con más obras publicadas.
Nota de última hora: Queridos aspirantes a escritor, a partir del 27 al 31 de
julio y del 24 al 29 de agosto Vicente Marco impartirá un curso de
escritura creativa en un entorno privilegiado, Fontilles, en plena
naturaleza y a un precio irrisorio de pensión completa.